Juan Carlos Sosa Azpúrua: Esclavo de la Libertad

Juan Carlos Sosa Azpúrua: Esclavo de la Libertad

La Libertad es un concepto complejo, hermoso, pero complejo. Me debato continuamente tratando de darle sentido total a mi entendimiento, y no pocas veces se me escurre de las manos, siento que pese a todo lo que he vivido, las verdades nunca terminan de escribirse con tinta definitiva, los borrones aparecen con los años, quito y pongo, añado, reduzco, amplío, edito.

¿Qué es la Libertad? ¿Hasta dónde alcanza lo concreto antes de perderse en lo intangible? ¿Somos capaces realmente de ser completamente libres? Desde luego que cada persona tendrá su particular respuesta, su forma individual y personalísima de entender su propia Libertad, y por eso lo que sea que permitamos acoger como definición de la misma, siempre será un imperativo categórico de la más completa interioridad del sujeto, algo con lo que nadie, absolutamente nadie, puede sentirse en el derecho de inmiscuirse.

Libertad y responsabilidad individual, destino, contexto y circunstancias son elementos tan infinitos como universos individuales existan; cada quien en su vida, cada persona experimentando su narrativa histórica existencial desde el momento que respira su primera bocanada de aire independiente del vientre materno, ésta y sólo ésta  es la certeza que abrigo cuando reflexiono sobre la materia, quizás tratando de entender el fuego que me quema las entrañas, impulsándome a emprender acciones que a simple vista lucen de imposible entendimiento para el espectador genuinamente preocupado por la suerte de mi vida.

La Libertad está tan entrelazada con la psique, que solamente puede derivarse de la película que proyecte el laberinto de Pandora que recorra cada quien dentro de su propio cerebro, pulsando las emociones y sus diversas interpretaciones, derivadas de la experiencia vital individual. Pese a esta premisa, que para mí es universal, hay algo que no puedo desprender del concepto total de Libertad. Al momento de cerrar la definición, me obligo a mirar a mi alrededor, palpar la historia de los pueblos, escudriñar el salvaje camino que hemos recorrido los humanos hasta llegar a la época contemporánea, este lugar y momento, aquí, sentado en mi casa, tecleando estas ideas en un intento de calmar mis elucubraciones lacerantes.

¿Qué es la Libertad? Curioso que al llegar a este punto final de mis reflexiones no pueda separarme del entorno donde existo, de una historia personal que tiene paisajes externos, personas, lugares, risas y lágrimas, manos y rostros, miradas, y evasiones…deudas.

Ningún hombre puede ser completamente libre si su entorno no se lo permite. ¿Y acaso no es un entorno el producto de la acción humana? ¿Qué sucedería en la humanidad hoy en día si ningún entorno permitiera la capacidad de ejercer la Libertad a plenitud?

En algún momento el entorno fue opresivo, y así evolucionó la especie, en la lucha inclemente por sobrevivir y lograr bienestar. Los caminos hacia la Libertad están coloreados de sangre, de dolor, de vidas que se apagaron durante el recorrido, hasta llegar al entorno apacible, al contexto existencial que da rienda suelta a otros aspectos distintos al de la mera supervivencia. Y eso no se logró solo, fue la consecuencia de la acción humana, de hombres que comprendieron que el entorno es importante, que es baladí pontificar sobre la Libertad humana si antes no se logra un mínimo de contexto exterior que permita que la interior fluya, más allá de lo material.

Es esta comprensión del concepto lo que amarra mi psique a unas emociones individuales de las que no puedo escapar sin desgarrarme como hombre, aquí está mi deuda, una que no puedo dejar de honrar a menos que decida convertirme en un extraño para mí mismo, un ser que jamás reconocería como auténtico; y eso no lo deseo… mi esclavitud aquí se convierte en Libertad si acepto los límites que me concede mi propia historia, esa que narra lo que habita dentro de mi mente, que es certeza pero nunca deja tampoco de ser una caja de Pandora.

Para muchos hombres la Libertad puede conseguirse en cualquier parte, porque ese contexto (el entorno) es algo exterior a ellos, y pueden alcanzarlo con solo hacer unas maletas y adaptarse.

Pero para otros hombres, algunos pocos, el contexto es parte intrínseca de la propia Libertad, la más íntima de todas, porque existe una historia y sus lecciones taxativas…un ruido de consciencia que obliga, porque recuerda que si existen entornos favorables en alguna parte eso se debe a una lucha previa, a hombres que entendieron que la Libertad no es un regalo…que la Libertad se conquista.

Reflexiono sobre estas cosas y concluyo que para este servidor la Libertad es una deuda…soy un esclavo de la Libertad.

@jcsosazpurua

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