Carolina Herrera llegó ultra-elegante y florida y Tommy Hilfiger con todo el rock: la Semana de la Moda de Nueva York confirmó este lunes, en su quinta jornada, que es la ciudad donde todo es posible.
La diseñadora venezolana, que en su momento vistió a Jackie Kennedy y más recientemente a Michelle Obama, se inspiró en flores coloridas en su elegante colección primavera-otoño 2015, donde incorporó un material normalmente destinado a los trajes de buzo.
A sus 75 años, Herrera es una de las grandes damas de la moda neoyorquina: quedó claro una vez más este lunes, durante su desfile en el teatro Lincoln Center.
Sus modelos llevan curiosos pequeños moños en el cabello, van de blanco, colores pasteles suave, amarillo, naranja, gasa y organdí (…) Pero la sorpresa llegó con el material que reinventó Carolina Herrera.
“Lo llamo tecnotela, o tecnopiqué”, explicó a la AFP antes de su desfile.
“Es un material que se usa normalmente para bucear (como el neopreno), pero se puede mezclar de manera moderna y es fascinante trabajar con él, porque se amolda de tal manera al cuerpo que le da a la mujer una silueta muy seductora y femenina”.
Carolina Herrera declinó esta tecnotela en conjuntos de chaqueta y falda blancas con los hombros suavemente redondeados, en vestidos largos sin tirantes y en cortos trajes “tailleur” de líneas depuradas y mangas tres cuartos.
Celebrada como la encarnación de una elegancia refinada y atemporal, Carolina Herrera, quien lanzó su marca en 1981 en Nueva York, fue recompensada al iniciarse la Semana de la Moda con el trofeo al “talento artístico” que entrega el museo del FIT (Fashion Institute of Technology), en un desayuno que reunió a unas 600 personas del mundo de la moda.
“Es un gran honor para mí ser reconocida después de todos estos años”, dijo. Cuando los periodistas le preguntaron cuál es el secreto de la longevidad de su marca, en un universo que se renueva tan rápidamente, rió: “¡Mi secreto es que a las mujeres les gustan mis colecciones!”.
– Festival de rock –
En el otro lado de la ciudad, en Park Avenue, Tommy Hilfiger entregó una colección muy rockera que abrió Georgia May Jagger, la hija de Mick Jagger y Jerry Hall.
En una armería transformada en festival de rock imaginario de los años 1970, dos percusionistas en un gran escenario marcaban el tempo del desfile. Las modelos, algunas con guitarra en bandolera, desfilaban sobre un suelo cubierto de falso césped en senderos bordados de flores de seda.
El tema principal de la colección fueron las estrellas y rayas, como ocurre a menudo en la casa Hilfiger. Además hubo muchos mini-shorts, mini-vestidos de gamuza con perforaciones en forma de estrella y grandes suéteres chics y cómodos acompañados de gorras y botines hasta el tobillo.
Hilfiger dijo a la AFP que el rock forma parte de su ADN y que quería darle un toque de “rock star” a su colección.
“A lo largo de los años, he colaborado con gente como Lenny Kravitz, Britney Spears, Jennifer Lopez, Beyonce, David Bowie y los Rolling Stones”, explicó.
Esta vez, “quise mostrar al público lo que podría ser el vestuario de una estrella de rock y que la gente pueda de hecho ponerse”. AFP