Cuba se convirtió en el mayor proveedor de médicos para la campaña contra el ébola en África, siguiendo una tradición de medio siglo que con los años devino en principal ingreso del país, pero ha generado críticas en asociaciones médicas.
“Vamos a cooperar con una brigada de 165 colaboradores, constituida por 62 médicos y 103 enfermeros, los que poseen más de 15 años de experiencia profesional”, dijo el ministro de Salud, Roberto Morales, al hacer el anuncio este viernes en Ginebra.
El envío de la brigada médica a Sierra Leona forma parte de una tradición que Cuba inició en Chile tras el terremoto de 1960, y que involucra hasta ahora a unos 135.000 médicos y paramédicos cubanos que han cumplido misiones en el exterior, según estadísticas oficiales.
Actualmente, unos 50.731 trabajan en 66 países de América Latina, Asia y África, la mayoría de ellos desplegados en Venezuela (más de 30.000) y Brasil (11.456), pero la cooperación llega incluso a Europa, con una pequeña brigada en Portugal.
Esa cooperación eventual y gratuita por más de 40 años cambió en 2004, cuando el extinto presidente Hugo Chávez (1999-2013) decidió retribuir a la isla, pagando los servicios que tomaron también un carácter permanente, por años.
La Habana, castigada por una fuerte crisis económica, extendió el cobro a otros países con recursos, manteniendo la gratuidad para naciones pobres como Haití.
Las largas estadías de trabajo de los médicos bajo contrato de pago dio pie a protestas de sindicatos y colegios médicos, que acusan a los cubanos de ocupar las plazas vacantes en detrimento de sus miembros.
El caso más reciente fue en abril pasado, cuando el primer ministro de Perú, René Cornejo, explicó al gremio médico -que demandaba la expulsión de los cubanos- que profesionales de la isla realizarían trabajo de asesoría y no de campo.
El gobierno cubano también ha enfrentado críticas por quedarse con una parte de las ganancias que pagan los países por esos servicios, como sucedió recientemente en Brasil.
En febrero de este año, el gobierno brasileño anunció un aumento del salario de los médicos cubanos tras una fuerte polémica en el país por sus condiciones laborales.
Los médicos extranjeros reciben el equivalente a 4.000 dólares por mes, solo que en el caso de los cubanos, el acuerdo es que Brasil paga ese dinero al gobierno cubano a través de la Organización Panamericana de la Salud. De los 4.000 dólares, los médicos cubanos recibían 400 dólares en Brasil y 600 les eran ingresados en Cuba para disponer de éstos a su retorno.
La diplomacia médica
La exportación de servicios, principalmente de salud, le reporta actualmente a la isla unos 10.000 millones de dólares al año, por encima del turismo y remesas familiares (2.500 millones cada uno) y las ventas de níquel (1.100 millones).
“En los años recientes, la diplomacia médica ha sido instrumental en la adquisición de capital (…) como lo demuestra el arreglo con Venezuela de doctores por petróleo”, señaló la investigadora independiente Julie Feinsilver, en el estudio “50 años de la Diplomacia Médica de Cuba: del Idealismo al Pragmatismo”, que preparó para la Universidad George Washington.
Feinsilver destacó que “la diplomacia médica, la colaboración entre países para que simultáneamente se produzcan beneficios en la salud y mejoren las relaciones, ha sido la esencia de la política exterior de la revolución desde sus inicios”.
Cuba envió a Argelia en 1963 su primera brigada médica, y en 1998, tras el terrible impacto de los huracanes George y Mitch en el Caribe, echó a andar su Programa Integral de Salud, que ha llevado a 25.000 médicos y paramédicos cubanos a 32 países, principalmente de la región.
Asimismo, 76.744 cooperantes, entre ellos 2.269 médicos, han participado en misiones médicas en 32 países africanos.
La Operación Milagro, un programa de cirugías oculares gratuitas, financiado por Cuba y Venezuela, ha beneficiado a más de 2,8 millones de personas en 35 países, según datos oficiales.
Cuba ofreció cooperación médica a Estados Unidos, país con el que no tiene relaciones diplomáticas desde 1960, cuando puso a disposición a 10.000 médicos para ayudar a los damnificados por el huracán Katrina, que devastó la ciudad de Nueva Orleans en 2005. Pero la propuesta fue rechazada por Washington.
La isla también ha colaborado en la formación de médicos y personal paramédico en 121 países de Asia, África y América, y en la isla se han graduado como médicos 38.940 jóvenes, principalmente de países subdesarrollados. AFP