El brasileño Lucas Di Grassi se adjudicó este sábado en Pekín el primer Gran Premio de Fórmula Eléctrica disputado en Pekín y que estuvo marcado por un espectacular choque entre el francés Nicolas Prost y el alemán Nick Heidfeld.
La carrera estuvo dominada de principio a fin por Prost, que partió desde la pole. El hijo del cuádruple campeón del mundo de Fórmula 1, Alain, fue golpeado por Heidfeld justo antes de la última vuelta.
Di Grassi (Audi Sport ABT Formula E team) terminó por delante del francés Franck Montagny (Andretti Autosport), segundo, y el británico Sam Bird (Virgin Racing), que pese a llegar cuarto a la meta se benefició del castigo impuesto al alemán Daniel Abt, que pasó de la 3ª a la 10ª posición.
“He tenido suerte pero también estaba en el sitio correcto”, reconoció Di Grassi.
El monoplaza de Heidfeld dio varias vueltas pero el alemán, que también tiene experiencia en la Fórmula 1, salió aparentemente ileso. Tanto él como Prost volvieron por su propio pie.
Este final dramático provocó estupor en el equipo e-DAMS, incluido Alain Prost, que apoya a su hijo en esta aventura.
La carrera no permitió ver una lucha entre dos nombres célebres en el mundo del automovilismo, Prost y Senna.
El brasileño Brunno Senna, sobrino de Ayrton, tuvo que abandonar en las primeras vueltas por otra colisión.
Tras Pekín, el campeonato de Fórmula E viajará a otras metrópolis del mundo, Putrajaya (Malasia), Berlín, Londres, pasando por Sudamérica (Punta del Este y Buenos Aires), Estados Unidos (Long Beach y Miami) y Mónaco.
AFP
