El hombre de Texas arrestado el viernes por arremeter contra la Casa Blanca estaba armado con un cuchillo cuando trepó la reja y llegó hasta la mansión presidencial cuando el mandatario de Estados Unidos Barack Obama ya había partido del lugar, dijo el sábado la Fiscalía de ese país.
El Servicio Secreto había dicho previamente que Omar Gonzalez, de 42 años, estaba desarmado.
Gonzalez fue acusado de entrar ilegalmente un edificio o territorio restringido cargando “un arma mortal o peligrosa”, según una declaración jurada difundida el sábado por la Fiscalía de Estados Unidos.
Si es hallado culpable, podría enfrentar hasta 10 años en prisión.
El affidávit, firmado por Daniel Hochman, un oficial del Servicio Secreto que estaba de guardia en la Casa Blanca cuando el incidente ocurrió, dijo que Gonzalez llevaba un cuchillo plegable con una hoja tipo sierra de nueve centímetros.
Según el documento, González atravesó la puerta norte y entró a la mansión.
“Después de que fue detenido, Omar Gonzalez le dijo al agente del Servicio Secreto de Estados Unidos Lee Smart que estaba preocupado de que la atmósfera estaba colapsando y que (él) necesitaba darle la información al presidente de Estados Unidos para que pudiera contarle a la gente”, dijo el affidávit.
El incidente, una de las violaciones de seguridad más importantes desde que Obama es presidente, despertó preguntas sobre los procedimientos de seguridad en la Casa Blanca, un complejo muy vigilado con oficiales del Servicio Secreto y francotiradores.
El Servicio Secreto dijo que incrementó la seguridad alrededor de la Casa Blanca y comenzó una revisión del accionar de la agencia, con una inspección física del área y entrevistas con el personal involucrado.
“Aunque anoche los oficiales mostraron un tremendo control y disciplina al lidiar con este sujeto, la ubicación del arresto de Gonzalez no es aceptable”, agregó.
Los resultados de la revisión serán enviados al secretario de Seguridad Interior Jeh Johnson.
CONFIANZA TOTAL
Mientras se esperan los resultados de la revisión, la directora del Servicio Secreto, Julia Pierson, ordenó incrementar la seguridad alrededor del área donde el intruso ingresó al territorio de la Casa Blanca.
“La directora Pierson ha ordenado el aumento inmediato de las patrullas de oficiales y las capacidades de vigilancia a lo largo de reja de la Avenida Pensilvania alrededor del complejo de la Casa Blanca”, dijo la agencia en el comunicado. “Estas medidas entraron en efecto anoche”
Un portavoz de Obama dijo que el presidente confiaba plenamente en la agencia encargada de protegerlo y que estaba seguro de que la revisión sería conducida a profundidad y profesionalmente.
“El presidente tiene confianza total en el Servicio Secreto y está agradecido a los hombres y mujeres que día y noche lo protegen a él, su familia y a la Casa Blanca”, dijo el portavoz Frank Benenati.
Un segundo hombre fue arrestado el sábado por ingresar a la Casa Blanca. El portavoz del Servicio Secreto Ed Donovan dijo que el hombre que se acercó a pie a las puertas del complejo, se le ordenó retirarse y luego regresó en su automóvil.
“Él se negó a irse y fue arrestado por invasión de propiedad”, dijo Donovan. No había más detalles disponibles.
El Servicio Secreto ha enfrentado una serie de escándalos y otras violaciones a la seguridad en los últimos años. En el 2009 una pareja penetró varios filtros de seguridad para entrar en una cena de estado en la Casa Blanca sin invitación.
La reputación de la agencia fue manchada aún más en el 2012 con un escándalo de prostitución que involucró a agentes durante una cumbre de presidentes en Colombia. Reuters