La organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (VEPPEX) pidió a la comunidad no olvidarse de “los presos políticos” en Venezuela y “seguir luchando por su liberación”, durante un evento realizado el sábado en Doral, publica El Nuevo Herald.
El acto planeado con anterioridad se realizó unas horas después de que una juez de ejecución en Venezuela le otorgara detención domiciliaria al ex jefe de policía de Caracas Ivan Simonovis, quien permaneció encarcelado por casi 10 años, acusado de la muerte de seguidores del fallecido ex gobernante Hugo Chávez durante el golpe de estado en su contra en el 2002.
Simonovis, quien purga una condena de 30 años, es considerado por activistas a favor de los derechos humanos como un prisionero político y se convirtió en un preso emblemático para la oposición venezolana.
Los miembros de VEPPEX y otras organizaciones que defienden los derechos humanos, denunciaron que en Venezuela hay cientos de personas presas por oponerse al gobierno, incluyendo decenas de estudiantes que permanecen arrestados desde las protestas de principios de este año.
“El objetivo de este evento es resaltar y mantener en el tapete público el tema de los presos políticos, ya que ese es un tema del que no se habla en el país [Venezuela] debido a la censura de los medios de comunicación por parte del gobierno”, dijo José Antonio Colina, presidente de VEPPEX.
Colina opinó que es tarea de los exiliados luchar por la liberación de los detenidos y dar a conocer sus casos.
“Esto se está olvidando. Queremos que nadie olvide que en Venezuela hay presos políticos y existe persecución política”, enfatizó.
Mientras tanto, el gobierno venezolano ha sostenido que en el país sudamericano no hay presos políticos. En una ocasión la fiscal general Luisa Ortega Díaz dijo que aunque haya personas con afiliaciones política que estén encarceladas, estas permanecen presas por cometer delitos comunes y no por sus ideales.
Sin embargo, activistas sostienen que el gobierno venezolano utiliza la estrategia de presentar cargos de delincuencia y terrorismo a lideres políticos de la oposición para arrestarlos y dictarles largas sentencias. Por ejemplo, el dirigente opositor Leopoldo López, Coordinador Nacional del partido político Voluntad Popular, quien permanece encarceladodesde el 18 de febrero, fue acusado en abril de asociación para delinquir, delitos de instigación pública y como autor intelectual de daños a la propiedad e incendios. Inicialmente López fue acusado de terrorismo y homicidio por las muertes de tres personas durante una marcha iniciada por él y lideres estudiantiles en febrero en Caracas, que terminó de forma violenta.
Colina advirtió que la oposición debe mantenerse “muy alerta” con respecto al otorgamiento de arresto domiciliario para Simonovis, ya que en su opinión, la liberación de un miembro de la oposición generalmente es seguida por el arresto de varios más.
“Mi teoría es que sueltan a un preso político y al mismo tiempo arrestan a 10 líderes importantes”, dijo.
Lo mismo opinó Patricia Andrade, activista de derechos humanos con la Venezuela Awareness Foundation, que desde Miami trabaja activamente con organizaciones estudiantiles en el país.
“[El gobierno] te distrae con un [preso] liberado y lo que hay debajo son diez personas más que van a ir a la cárcel o que siguen arrestados”, dijo Andrade. “Por eso es que tenemos que pelear por todos, hasta que sena liberados”.
Andrade recordó que en el mismo caso de Simonovis también arrestaron bajo acusaciones similares a otros cinco policías metropolitanos que aún permanecen en la cárcel, tras más de 11 años encerrados.
“¿Ellos cuando serán liberados?”, preguntó. “Hay gente que ya ni recuerda que esos policías siguen presos”.