Con base a esto estoy convencido en que se debe reestructurar y modificar cuanto antes la administración pública, debe adecuarse su estructura organizacional a los nuevos retos y necesidades del municipio. La Alcaldía de Maracaibo debe ser modernizada y constituir un gobierno municipal de verdadera unidad democrática. La unidad es lo que quiere el pueblo a todas sus instancias de gobierno y ante esta grave situación económica que padece el municipio estamos obligadas todas las fuerzas democráticas a meter el hombro y el gobierno a dar ejemplo de una profunda austeridad. Reducir gastos, mover el tamaño de la nómina mayor y planificar las inversiones son acciones que deben tomarse con el fin principal de atender a las comunidades a la medida de sus expectativas. Citando a Don Eleazar López Contreras “nuevos hombres y nuevas ideas”, es nuestra responsabilidad darles la cara a los vecinos, y ciertamente en este momento no contamos con las herramientas necesarias para resolver sus problemas siendo imperativo conectarse con la gente de los sectores mas empobrecidos de la ciudad.
La inflación afecta a los gobiernos municipales y Maracaibo no es la excepción, la situación económica del municipio nos exige una reducción de direcciones que compone la nómina mayor, eso hay que mejorarlo para bien de la gestión municipal, de esta manera se haría más eficaces las políticas públicas. La ciudad debe ser atendida en un orden de prioridad, los sectores no consolidados como por ejemplo, el oeste de la ciudad le es de carácter urgente la constitución de un gabinete social, integrado por lideres que sean de la zona, a fin de darle la debida atención y respuestas a sus problemas.
Apuntemos a la redimensión de la Administración Pública para procurar su eficiencia y enfrentar los principales problemas de Maracaibo entre todos, especialmente el de la basura, eso no admite más excusas las cuales nos hacen vulnerable ante la opinión pública y mucho daño a nuestra imagen opositora en la ciudad. Igualmente atender las áreas de transporte publico, ornato, vialidad, semáforos no podemos ceder espacios en nuestras competencias locales, debemos actuar con urgencia en virtud, que los escenarios posibles son dos: o lo hacemos o nos vamos por la borda, por tercos, ya perdimos la gobernación y quedamos a pique el 08 de Diciembre del 2.013, donde el candidato del PSUV, impuesto por las entrañas del centralismo fue derrotado por todos los maracaiberos e inclusive por sectores muy importante del PSUV que no se lo calaron.
Tengo el palpito que el PSUV aprendió la lección y se disponen a marchar juntos en Maracaibo. Planteo que estos cambios deben apuntalarnos hacía la reducción de la burocracia y cuando hablo de reducción de la burocracia no me refiero a los empleados públicos, sino de la nómina mayor existente, desde luego también hace falta mas empuje y direccionalidad desde la Alcaldía. En cuanto a las prioridades, esta nueva camada de lideres deben asumir la conducción del nuevo gobierno dispuesto a luchar por la ciudad a tiempo completo, a llegar temprano a su sitio de trabajo y pasar revistas a sus comandos y desplegarse por toda la ciudad, a fin de que se conviertan cada uno en líder de la del área que les toca dirigir, ser voceros creíbles de su gestión de gobierno, dentro de un marco de trabajo que supervise diariamente la Alcaldesa.
No debe tratarse de unos cambios de nombres, ni de odiosos enroques, sino que se deben tomar decisiones que materialicen una reestructuración profunda de la Alcaldía, tomando en cuenta a los partidos opositores y sociedad civil para formar un frente de lucha unitaria, privilegiando al oeste de Maracaibo donde por cierto el Gobierno Regional esta metido a fondo con una estructura paralela, las comunas y consejos comunales las cuales reciben más recursos que las alcaldías, guerra avisada no mata soldados y si lo mata es por descuidado, como dicen aquí en mi Maracaibo hermoso solo hay dos cosas infinitas “ el universo y la estupidez humana ”. Actuemos.