Investigadores estadounidenses informaron el martes haber descubierto los restos de un submarino alemán y de un carguero de bandera nicaragüense que participaron en una batalla en el Atlántico durante la II Guerra Mundial, a menos de 50 km de las costas del país.
A más de 70 años de su hundimiento, el submarino nazi, el U-boat 576, fue localizado cerca del Cabo Hatteras en Carolina del Norte (sureste), descansando en el lecho marino muy cerca del carguero Bluefields, indicó en un comunicado la oficina de santuarios marinos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA).
“Esto no es solo el descubrimiento de un naufragio”, dijo el líder de la expedición de la NOAA, el científico Joe Hoyt.
“Es una inusual ventana a una histórica batalla y al paisaje de un campo de batalla submarino de la II Guerra Mundial”, según la NOAA, que desde 2008 realiza un trabajo detectivesco en busca de naufragios de esa época en las costas de Carolina del Norte.
El 15 de julio de 1942, un convoy de 19 barcos mercantes, entre ellos el Bluefields, transportaba insumos para la guerra desde Norfolk, Virginia (este), hasta Cayo Hueso, en el extremo sur de Florida (sureste), cuando de pronto fue atacado.
El U-576 logró hundir al barco de bandera nicaragüense y dañó seriamente a dos más, antes de que fuera a su vez inutilizado por un avión de la Armada estadounidense que lo bombardeó, y un barco mercante del convoy que también abrió fuego.
“El Bluefields y el U-576 se perdieron en minutos”, indicó la NOAA.
“Poca gente se da cuenta de lo cerca que estuvo la guerra de las costas estadounidenses”, dijo David Alberg, directivo de NOAA.
El carguero y el submarino nazi “nos ofrecerán información adicional sobre un capítulo relativamente poco conocido de la historia estadounidense”, señaló Alberg.
No hubo víctimas del lado estadounidense, pero el submarino alemán se hundió con toda su tripulación, por lo que el lugar del naufragio es considerado un camposanto submarino.
El ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania, citado en el comunicado, dijo no estar interesado en participar en la recuperación de los restos del submarino, al tiempo que pidió, “en la medida de lo posible” dejar los restos “en el lugar para permitir que los muertos descansen en paz”.
Los exploradores submarinos de la NOAA, Okeanos y SRVX Sand Tiger, participaron en las labores de inspección de las dos naves, cuya identidad fue corroborada en agosto pasado, indicaron las autoridades estadounidenses.
AFP