Dos compañeras de clases, el jueves 4 de diciembre, salieron de sus hogares, ubicado en la comunidad de San Francisco, con la intención de hacer un trabajo, pero nunca regresaron a sus hogares.
La preocupación invadió a los padres de las adolescentes de 15 años, quienes cursan el cuarto año de bachillerato juntas. Al cabo de unas horas recibieron la llamada del teléfono de una de las jóvenes, del otro lado de la bocina se escuchaba una voz masculina, que indicaba que las dos muchachas estaban secuestradas y para liberarlas debían cancelar la cantidad de 60 mil bolívares fuertes.
De seis a siete llamadas recibieron los padres, quienes desesperados acudieron ante la sede del Conas para colocar la respectiva denuncia.
El sábado, los padres de las adolescentes recibieron una nueva llamada telefónica, eran las jovencitas quienes indicaban que las habían liberado y que se encontraban en la avenida Florencio Jiménez, a la altura de Villa Productiva, en donde fueron a buscarlas. Debido a las investigaciones las muchachas fueron trasladadas hasta la sede del Conas, en donde fueron entrevistadas, en medio de las preguntas, las adolescente confesaron que se trató de un engaño a sus padres, que lo hicieron porque querían pasar un fin de semana fuera de su hogar.
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