Piden investigar a George W. Bush por torturas

Piden investigar a George W. Bush por torturas

George W. Bush

La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) presentó este martes una carta al fiscal general de Estados Unidos (EEUU), Eric Holder, en la que demanda una investigación a los responsables de las torturas aplicadas por interrogadores de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), a supuestos acusados de terrorismo.

Entre los demandados está el expresidente de la nación norteamericana (2001-2009) George W. Bush.





Estas denuncias fueron presentadas recientemente al Senado norteamericano, a través de un reporte que expone la detención secreta de más de un centenar de personas sospechosas de actividades terroristas encarceladas en prisiones clandestinas bajo la presidencia de Bush.

En el documento entregado a Holder, la ACLU pide que se nombre un fiscal especial para investigar lo que parece ser “una vasta conspiración criminal, con apariencia de legalidad, de cometer torturas y otros delitos graves”.

La misiva entregada al Departamento de Justicia, coincidió con un editorial publicado este lunes por el diario The New York Times, que pidió también enjuiciar, tanto al al expresidente Bush, como al ex vicepresidente Dick Cheney, quienes se desempeñaron como las principales figuras políticas del gobierno estadounidense en el período 2001-2009, cuando se produjeron las torturas.

Estas prácticas violentas también involucran al jefe de gabinete de Cheney, David Addington; el exdirector de la CIA George Tenet; y a John Yoo y Jay Bybee, abogados de la Oficina de Asesoría Legal, que redactaron lo que se conoce como los memorandos de la tortura, refiere una nota de la agencia Prensa Latina.

El Times pide además que se considere investigar al funcionario de la CIA, José Rodríguez, quien ordenó la destrucción de las cintas de vídeo. Así como a los psicólogos que idearon el régimen de la tortura, y los empleados de la agencia de espionaje que aplicaron los métodos crueles e ilegales de interrogatorio.

“Tanto ACLU como el Times coinciden en que se debe investigar la crueldad empleada con métodos como la alimentación rectal y la simulación de ahogo (waterboarding). Además de la presencia de detenidos colgados por las muñecas, confinados en ataúdes, golpeados y amenazados de muerte o mordeduras de perros, los que califican como actos delictivos”, señala Prensa Latina.

“Estos son, simplemente, los crímenes. Están prohibidos por la ley federal que define la tortura como la imposición intencional de dolor físico o mental severo o sufrimiento, y también están prohibidos por la Convención contra la Tortura, el tratado internacional que Estados Unidos ratificó en 1994 y que requiere el enjuiciamiento de todo acto de tortura “, subraya el editorial del diario.

El editorial del rotativo también critica a la administración del actual presidente Barack Obama por no llevar ante la justicia a los responsables de las torturas a los sospechosos de terrorismo.

“Es difícil imaginar que la actual administración tenga el coraje político de ordenar una investigación completa que incluya las principales figuras de la administración Bush, entre ellos Cheney, y el ex director de la CIA George Tenet”, planteó el diario.

Los métodos de la CIA fueron aprobados luego de que en 2001, Estados Unidos iniciara una supuesta “guerra contra el terrorismo” en la que atentó contra ciudadanos de otros países.

Amparado en ello, se violaron los Derechos Humanos de miles personas y el derecho internacional de muchas naciones con la aplicación de técnicas de espionaje.

Para ese año se legalizó el secuestro y transporte de sospechosos por terceros países, interrogatorios con técnicas consideradas como tortura o la creación de prisiones secretas fuera de la legalidad.

En agosto pasado, el presidente estadounidense, Barack Obama, admitió que la seguridad de su país cometió en muchos casos torturas para obtener información, tras los atentados de 2001.

Obama señaló: “Torturamos gente”, al tiempo que agregó: “cruzamos la línea, hicimos cosas que van contra nuestros valores”.

En ese momento, el presidente justificó las acciones de torturas y manifestó que son considerables dado los atentados sufridos en contra del World Trade Center de Nueva York.

Años antes, en 2006, el expresidente de de ese país, George Bush, reconoció la existencia de cárceles secretas operadas por la CIA, luego que el diario The Washington Post reveló en noviembre de 2005 la ubicación de esos lugares clandestinos.

AVN