Incertidumbre sobre la recuperación de Michael Schumacher

Incertidumbre sobre la recuperación de Michael Schumacher

FOTO VINCENZO PINTO / AFP
FOTO VINCENZO PINTO / AFP

La incertidumbre sobre la recuperación de Michael Schumacher, el secretismo en torno a su estado y el apoyo de los incondicionales marcarán mañana el primer aniversario del grave accidente que sufrió el “hombre récord” alemán de la Fórmula Uno.

El siete veces campeón del mundo de Fórmula Uno, que cumplirá 46 años el 3 de enero, permanece en su casa de Gland (Suiza), a donde fue trasladado en septiembre tras despertar del coma al que fue inducido en el hospital de Grenoble (Francia) y pasar un tiempo en una clínica de rehabilitación de Lausana (Suiza).

Allí trabaja a diario en la recuperación de sus facultades, sensiblemente afectadas tras sufrir graves lesiones craneales esquiando en Méribel, en los Alpes franceses, un proceso que según los expertos puede alargarse varios años y con un éxito incierto.





Mientras algunos médicos confían en que el piloto pueda en algún momento volver a valerse para la vida cotidiana tirando de tenacidad, otros expertos consideran que Schumacher quedará inválido.

Más allá de estas especulaciones, apenas han trascendido a la opinión pública detalles sobre su evolución -en su mayor parte apuntes inconcretos pero optimistas, demasiadas veces rodeados de rumores sin fundamento-, ya que tanto la familia como el equipo médico que le trata están guardando un estricto silencio.

“No podría dar nunca una indicación seria (sobre su evolución). Simplemente no es posible en esta situación”, aseguró la manager de Schumacher y actualmente portavoz de la familia, Sabine Kehm, a finales de noviembre.

En septiembre, Kehm celebró en un comunicado que Schumacher había “hecho progresos con respecto a la gravedad de su herida”, pero agregó que por delante quedaba “un camino duro y largo”.

Éstas son las últimas declaraciones conocidas sobre su situación, tras las de julio de la mujer del piloto, Corinna Schumacher, en las que de forma ambigua apuntó: “Vamos cuesta arriba, por supuesto lentamente, pero al menos avanzando”.

Este secretismo provocó un turbio suceso en agosto, cuando fue robado el informe médico del heptacampeón y ofrecido -sin éxito- a cambio de dinero a varios medios de comunicación, supuestamente por un miembro de la guardia área de salvamento suizo que se suicidó un día después de ser arrestado por este motivo.

Pese a esta administración de la información con cuentagotas, los incondicionales de Schumacher, que se cuentan por miles en Alemania, siguen teniendo muy presente al piloto que ganó 91 gran premios de Fórmula 1 (el primero hace ahora 20 años), acumuló 155 podios y 77 vueltas rápidas, y logró partir en 68 ocasiones de la primera posición de la parrilla de salida.

De hecho, el gigante tecnológico estadounidense Google informó recientemente que “Schumacher” había sido la palabra más buscada en Alemania este año; mientras que Yahoo ha asegurado que el piloto de Fórmula Uno fue el deportista más buscado en 2014, por encima del astro madrileño Ronaldo.

Pese a la efeméride de mañana, no está previsto en Alemania ningún acto para recordar el primer aniversario del accidente de Schumacher, padre de dos hijos.

El 29 de diciembre de 2013, mientras esquiaba con su familia y unos amigos en Méribel, Schumacher sufrió una grave caída y se golpeó con una piedra en la cabeza, lo que le provocó un gran derrame en el cerebro a pesar de llevar casco.

El piloto fue operado en dos ocasiones en las siguientes horas y se le indujo un coma por razones médicas en el que permaneció por seguridad durante meses: en abril comenzó a disfrutar de “momentos de consciencia” y en junio ya estaba plenamente despierto, según fueron informando sus allegados.

A continuación fue trasladado a una clínica de rehabilitación en Lausana, cerca de su casa suiza de Gland, en la que permaneció hasta septiembre, momento en el que fue llevado hasta su domicilio, que ha sido habilitado para su tratamiento.

El pasado 13 de noviembre, coincidiendo con el vigésimo aniversario de su primera victoria en un gran premio de Fórmula Uno, la familia reactivó la página oficial de Schumacher, como respuesta a las incesantes muestras de afecto, y el piloto recibió el premio alemán “Bambi”, que se otorga a las personas “con visión” por “sus éxitos y rendimiento”. EFE