Monseñor Aldo Giordano (Cuneo, Italia, 1954), nuncio apostólico del Vaticano en Venezuela, emana humildad.
En medio del calor abrasador propio del Caribe, accedió amable a conversar con PANORAMA unos minutos durante su visita a Los Puertos de Altagracia, capital del municipio Miranda, en la Costa Oriental del Lago, a donde arribó para encabezar la coronación canónica de la Virgen de Altagracia escenificada el viernes a orillas del Lago de Maracaibo.
El máximo representante del Vaticano en Venezuela —desde octubre de 2013, cuando sustituyó a Pietro Parolin— cree que el diálogo es el camino para reencontrarse y afirmó que “requiere coraje”.
Sobre Cuba y Estados Unidos aseguró que el Papa, fiel creyente de la paz de los pueblos, se dedicó personalmente a lograr la histórica reconciliación.
Sobre la beatificación de José Gregorio Hernández, el Siervo de Dios dijo que “el Vaticano, el Papa y la Iglesia” están muy interesados y estudian el caso.
—El país ha vivido meses de tensiones políticas, ¿cómo ve la posibilidad de retomar el diálogo?
—Represento al papa Francisco en Venezuela, y el Papa es un gran protagonista de la paz por el mundo entero, por todos los países, el papa Francisco quiere a Venezuela y sigue cada día la situación de Venezuela. El Papa cree en la paz para todos los países, cree que el camino del pueblo de Venezuela es la paz. El camino de la paz es siempre el diálogo, el diálogo es siempre posible a pesar de las dificultades y las adversidades que conocemos. Creo que tener un lugar de diálogo para considerar juntos los problemas comunes y trabajar por el bien común de los pueblos es muy importante.
—¿Qué le dice usted tanto a la oposición como al oficialismo ante la necesidad de dialogar en medio de una crisis política evidente?
—Creo que todos reconocen que hay problemas. El deseo sería considerar como prioritario, como prioridad, el bien común de todo el pueblo, esperamos encontrar caminos para trabajar por el bien común del pueblo, no por una parte del pueblo.
—Su Santidad fue protagonista de una reconciliación histórica entre Cuba y Estados Unidos. ¿Cómo percibe este acercamiento?
—El acontecimiento de esta nueva posición entre Cuba y los Estados Unidos ha visto al Papa como protagonista. Él se ocupó personalmente de esto, con diálogo a través de cartas con ambos presidentes para favorecer las condiciones del diálogo. Esto es un buen ejemplo. Todos reconocen que hay problemas en los países, que hay problemas en Cuba, que hay problemas en Venezuela, que hay problemas en Italia, pero los pueblos necesitan del coraje del diálogo, el diálogo no es fácil, necesita tiempo, necesita coraje, necesita paciencia, necesita compromisos algunas veces. Los pueblos no merecen violencia.
—¿Hasta qué punto ve posible un verdadero reencuentro entre Cuba y Estados Unidos luego de más de cinco décadas?
—Es una nueva etapa del camino, es una puerta que está abierta. Tenemos la esperanza que es un camino de colaboración como sería normal que sea entre los pueblos, que nos ayudamos por el bien común de los pueblos.
Estamos en un momento histórico donde todos los acontecimientos que ocurran en un país interesan, entre países no podemos vivir aislados.
—El Papa tiene conocimiento de las peticiones hechas desde Venezuela para la beatificación del doctor José Gregorio Hernández, ¿qué tan cercano está que se cumpla ese proceso?
—La Iglesia está muy interesada, el Vaticano está interesado, el Papa está interesado, yo estoy muy impresionado de cómo el doctor José Gregorio es querido en Venezuela, todos los rincones donde he ido encuentro este amor por el doctor José Gregorio. Es ya una cosa muy interesante, él es un ejemplo, es un testigo, produce mucho bien, es un personaje de unidad en el país, es lo más importante.
—¿Qué sigue faltando para que se produzca este reconocimiento ante la Iglesia?
—Lo que falta es la documentación científica de un milagro, se escucha que hay muchos milagros de personas que afirman haber obtenido milagros por medio del doctor José Gregorio. La Iglesia va lentamente en estos casos porque necesita documentación científica, la Iglesia está estudiando muchos casos. Hay mucho interés, se reconoce que él es un testigo del evangelio, es un testigo de la solidaridad, un testigo por los pobres, es un testigo científico también.
—¿Tendrá Venezuela un santo pronto?
—La Iglesia trabaja siempre por la eternidad, los santos son por la eternidad, siempre pronto es lejos, pero esperamos. Fui nombrado nuncio apostólico en Venezuela oficialmente el 26 de octubre de 2013, fecha del nacimiento del doctor José Gregorio Hernández, estoy convencido que el doctor Hernández me acompaña en mi servicio en Venezuela.