La fiscal que investiga la muerte de Alberto Nisman, quien había denunciado a la presidenta Cristina Fernández, dijo hoy que una testigo que denunció a la prensa graves irregularidades en el operativo que se desarrolló en casa del procurador la noche de su muerte modificó su relato en su declaración testimonial.
Natalia Fernández, testigo del procedimiento judicial que se siguió en la vivienda de Nisman en la noche del 18 de enero, cuando fue encontrado con un tiro en la cabeza en el baño, “modificó su relato respecto de la información que fue divulgada a través de distintos medios de comunicación”, señaló la fiscal del caso, Viviana Fein, en un comunicado que no detalla qué declaró la joven ni qué ha cambiado de su relato.
Fernández había declarado al diario Clarín que el personal que participó en el operativo repasó la documentación esparcida sobre la mesa de Nisman, tocaron el teléfono del fiscal, usaron los baños y la cafetera, entre otras irregularidades.
La fiscal, por otra parte, tomó hoy declaración testimonial al encargado del levantamiento de rastros en el apartamento de Nisman y lamentó la difusión de detalles de la investigación, de sus interrogatorios y de los testigos en medios locales.
“Por tal motivo, se solicita a todos los medios que se respete la intimidad tanto de los testigos como de sus familias y que se recabe la información a través de los carriles oficiales”, concluye el comunicado.
La investigación de Fein, que un mes después de la muerte de Nisman no ha logrado avances significativos en el proceso, ha sido cuestionada por la exesposa de Nisman, la jueza Sandra Arroyo Salgado, que descarta la hipótesis del suicidio y ha pedido veedores de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para garantizar un proceso imparcial.
Nisman, que investigaba el atentado cometido contra la mutual judía AMIA que dejó 85 muertos en 1994, fue encontrado muerto, con un tiro en la cabeza, la víspera de comparecer ante el Congreso para detallar su denuncia contra la presidenta argentina, Cristina Fernández, por presunto encubrimiento de los sospechosos iraníes del ataque. EFE