Ochenta por ciento de la actividad comercial en una agencia de viajes es por la venta de pasajes aéreos. Al igual que los usuarios, este sector comercial aún espera por el cumplimiento de las palabras de Nicolás Maduro en junio de 2014: “Somos capaces de resolver de raíz problema con las aerolíneas”. Más de un año y medio ha pasado desde el repunte de los precios en la boletería internacional pero las aerolíneas no restituyen ni las frecuencias ni las plazas, porque no les han pagado las divisas en mora, publica Correo del Caroní.
Las decenas de clientes que antes visitaban las agencias de viajes en busca de pasajes ya no están. La mayoría de los escritorios de las ejecutivas de ventas lucen vacíos, pues el negocio que antes era rentable, pasa por el momento más crítico de su historia.
Luisa Zurita, gerente de ventas de la agencia de viajes Candes Alta Vista, recuerda que hace un par de años cuatro ejecutivas vendían boletos en una agencia que permanecía llena de clientes. “Ahora quedo solo yo y va a llegar un momento en que no vamos a poder trabajar más porque no es rentable y vendamos o no, tenemos que seguir pagando impuestos”, comentó.
La trabajadora señaló que la ausencia de pasajes en rutas internacionales y nacionales se mantiene y se ha acentuado en los últimos cuatro meses. “Conviasa que es del Gobierno soltaba cupos internacionales el año pasado y desde noviembre de 2014 cerró los pasajes internacionales, uno tenía un teléfono al que se llamaba, colocaban a los pasajeros en espera y luego lo confirmaban”, contó Zurita.
“Estamos viviendo una crisis muy dura, ya ni siquiera se consiguen boletos de Puerto Ordaz a Caracas”, añadió.
Sin respuestas
A mediados de 2014, el presidente ejecutivo de la Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela (ALAV), Humberto Figuera, explicó la realidad del mercado aeronáutico civil en el país: “Si nuestros ingresos dependen en 80 por ciento de venta de boletería, y bajó en casi 60 por ciento, hasta qué punto una empresa pequeña puede aguantar una situación de este tipo. Confiamos en una solución, pero necesitamos respuestas e inventario, de lo contrario no podemos seguir abiertos”.
El gremio calculó para 2014 una pérdida de 55 por ciento de los asientos de líneas extranjeras que operan en Venezuela
El 5 de junio de 2014, el presidente Nicolás Maduro expresaba sentirse capaz de resolver de raíz el impago de 3.500 millones de dólares. La deuda vencida con las operadoras aéreas internacionales de 2012 y 2013 se canceló en junio de 2014 con quitas de hasta 30 por ciento. Para diciembre del año pasado, la mora se mantenía intacta.
Meses antes de hablar Maduro de una “guerra económica” de las aerolíneas extranjeras contra Venezuela, el exministro de Petróleo y Minería y también otrora canciller y actual embajador de Venezuela ante la ONU, Rafael Ramírez, sostuvo que la baja en la frecuencia de rutas se debía al desvío de la oferta para Brasil, por el Mundial de fútbol.
Caída en picada
Aunque en las agencias señalan que no hay pasajes, empiezan a proliferar vendedores que prometen conseguir pasajes al destino que sea, aunque a precios muy altos, conseguidos a través de compras en dólares canjeados luego a la cotización del mercado paralelo o, directamente, por la línea aérea. Boletos a México, ecuador y Chile se cotizan hasta en Bs. 165 mil, mientras que a destinos como Aruba o Curazao alcanzan hasta Bs. 55 mil.
Zurita asegura que desconoce cuál es el método que utilizan, “porque sencillamente esos pasajes no están en el sistema”.
“Los pocos pasajes que se consiguen en el sistema son muy costosos -admite- y la clase media no puede pagarlos. Ya el negocio no es rentable”, recalcó, al recodar lo abarrotado que antes estaba el establecimiento, “pero con esta crisis ya no hay afluencia de pasajeros”.
Claudia Osorio, ejecutiva de ventas de la agencia de viajes Albatros, coincidió en la baja disponibilidad de pasajes tanto en rutas nacionales o internacionales y en las cuantiosas pérdidas que, sin embargo, no han obligado al cierre “porque tenemos la esperanza de que se estabilice el negocio”.
Hace un par de semanas, sostuvo, había opciones de vuelo para abril y mayo a República Dominicana a Bs. 54 mil; Panamá, a Bs. 63 mil; a Miami, a Bs. 103 mil y a Aruba, a Bs. 29 mil, “pero ya se acabaron”.
Si alguien quiere viajar a otro destino y usa como parada algunas rutas disponibles, destacó Osorio, puede tener acceso a divisas oficiales pues se acepta una escala; “puede comprar la primera parada en bolívares y la siguiente en dólares”.
Como en éste y otros sectores, la cacería se vuelve la principal habilidad para hallar una opción de cruzar la frontera, sin que el bolsillo salga golpeado, un deseo imposible en estos días.