Estados Unidos y Cuba comenzaron hoy una reunión preliminar para definir la metodología de su futuro diálogo sobre derechos humanos en un “clima de respeto”, pese a las marcadas diferencias sobre ese asunto, aseguró una integrante de la delegación cubana. EFE
La reunión en el Departamento de Estado comenzó a las 9.00 hora local (13.00 GMT) y busca definir las pautas de un futuro diálogo en profundidad sobre ese tema, probablemente el más espinoso en el proceso de normalización de relaciones diplomáticas iniciado el pasado diciembre.
“Se ha avanzado en la agenda prevista, en un clima de respeto y de profesionalidad”, dijo en declaraciones enviadas a Efe la representante permanente de Cuba en Ginebra, Anayansi Rodríguez Camejo, una de las integrantes de la delegación cubana.
“Por el momento, se han discutido las cuestiones relacionadas con la metodología del dialogo y luego de este receso continuaremos con los otros temas de la agenda”, añadió Rodríguez.
La delegación estadounidense en esa reunión está encabezada por el subsecretario de Estado para Democracia, Derechos Humanos y Trabajo, Tom Malinowski; mientras que la cubana la lidera el subdirector de Asuntos Multilaterales y Derecho Internacional de la Cancillería de Cuba, Pedro Luis Pedroso.
Según el Departamento de Estado, la reunión tiene como único objetivo definir la “estructura y la metodología” de un futuro diálogo, y por tanto no prevé que haya conversaciones a fondo sobre el tema derechos humanos ni declaraciones a la prensa de la delegación estadounidense.
No obstante, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba aseguró este lunes que pretende exponer durante esta reunión sus “logros en la promoción y protección de todos los Derechos Humanos” tanto en la isla como en los países donde está presente la cooperación cubana, con especial énfasis en la sanidad y educación.
Según adelantó Pedroso la pasada semana en La Habana, Cuba también expondrá sus “preocupaciones” sobre la situación de los Derechos Humanos en Estados Unidos y otros lugares.
Estados Unidos tampoco ha ocultado sus diferencias con Cuba en lo referente a los derechos humanos, especialmente respecto al trato a los disidentes en la isla, y ese tema se perfila como el mayor escollo en las negociaciones para retomar las relaciones diplomáticas, rotas en 1961, y abrir embajadas.
“El diálogo tendrá que superar un legado de desconfianza y las enormes diferencias conceptuales entre los dos países en el tema de derechos humanos. Este encuentro es el comienzo de un proceso largo y difícil”, afirmó este lunes el analista Geoff Thale, director de programas de la Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA).