El tema del transporte público en el municipio Caroní, estado Bolívar, es sinónimo de escuchar a los usuarios quejarse del cobro abusivo de las tarifas, horas prolongadas de espera y pocas unidades de traslado, generando gran malestar entre quienes utilizan este medio de transporte. Vanessa Galvis M/ Nueva Prensa Guayana
En un recorrido que realizó el equipo reporteril de este medio impreso, se pudo constatar en las diferentes paradas el malestar, escuchándose disgustos por querer llegar temprano a casa y las horas de espera en las paradas.
Según declaraciones dichas por los entrevistados indican que las rutas que van hacia los sectores de Unare, Caujaro, Castillito y Trébol cobran Bs 10 e incluso más si pasa de las 7:00 de la noche.
Lisseth Hernández, comentó que es “patético porque no hay control en los precios, cada unidad de transporte te quiere cobrar desde 10 hasta 100 Bs., especialmente los de la ruta a San Félix – Alta Vista, cuando el pasaje real es de 6,50 bolívares”.
Seguidamente, mencionó que las unidades se encuentran en pésimas condiciones, pues los cauchos en su mayoría están lisos y los asientos destruidos.
“El maltrato es increíble, además de abarrotar el autobús como si la gente fuera animal, no conforme con eso te atracan y si llegan los patrulleros no es a poner orden, y para colmo no se respetan las paradas, te bajan donde les da la gana”, expresó Hernández.
Braulio Valdivieso, usuario afectado, aseguró que el maltrato de los choferes hacia los pasajeros es horrible, “si hablamos de los taxistas ni se diga, cobran como si fuese a viajar a Maturín, una carrera de Puerto Ordaz a San Félix te cobran hasta 400 bolívares y más si es de noche”.
Hicieron un llamado al alcalde José Ramón López, para que se aboquen a resolver la problemática. “Cuando hay actos con el alcalde utilizan los autobuses para trasladar a la gente y luego los guardan. Tienen que poner en eso esas unidades para todos los ciudadanos”, sentenció Valdivieso.
Una señora, quien prefirió omitir su nombre, añadió que “para movilizarse en Guayana tiene que ser a través de puro taxi porque, los autobuses son escasos y uno por la necesidad agarra los taxis”.
Blanco de robos
Otro mal que se suma al transporte público en esta metrópoli, son los embates de la delincuencia, pues a diario son asaltadas más de 10 unidades, sin que ningún organismo policial busque solución al asunto.
“Aparte que sufrimos maltratos verbales de parte de los conductores, quienes constantemente saturan de pasajeros los autobuses, tenemos que enfrentar los constantes robos ante la ausencia de los organismos de seguridad en las paradas del municipio”, dijo un usuario, quien prefirió omitir su identidad.
Sin embargo, Jesús Marcano, conductor de autobús, detalló la forma como operan “los rateros”, estos buscan celulares costosos, a los jóvenes e incluso mujeres y hombres les quitan cadenas de oro, reloj; a ellos muchas veces no les quitan dinero, pero cuando lo hacen se llevan cerca de 2.000 bolívares.
“Los delincuentes esperan que el transporte realice una parada y se estacionan al lado de la puerta de entrada, por lo general son los que van en una moto, el que va de parrillero es el que sube a cometer el robo, mientras que el otro lo espera para arrancar”, acotó.