Una campaña persistente del gobernador de Bolívar, Francisco Rangel Gómez, ha sido la del “agua para el progreso”. No lo sintieron así los cientos de upatenses que este miércoles tomaron calles y avenidas de esa ciudad, justamente, por una causa: desde hace seis días están sin agua, así lo informó Correo del Caroní
Marcos David Valverde
La atención gubernamental se ha limitado a llenar algunos baldes en las casas con camiones cisternas que no alcanzan a cubrir todos los sectores de la capital del tercer municipio más importante del estado Bolívar.
La situación llegó a donde tenía que llegar y los upatenses se manifestaron: este miércoles, luego de seis días sin agua, los habitantes de la capital de Piar salieron a la calle a protestar.
A finales de la tarde, en muchos lugares de la ciudad la gente cerró calles y avenidas, acompañando la protesta con cacerolazos, pancartas y reclamando solución del problema del suministro.
No sirvieron de mucho los mensajes de la representante de Hidrobolívar en Upata, Nairobys Fuentes, sobre los “nueve cisternas que están en las comunidades atendiendo a nuestra población”, ni la promesa de que “estamos trabajando arduamente para resolver la contingencia y restituir el suministro lo antes posible”.
Ofrecimientos similares se escucharon de boca del gobernador del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez. Y también algunas excusas, como la que pronunció en su programa de radio el martes pasado: “tenemos que tener mucho cuidado con el uso del agua potable (…) en este momento estamos pasando graves.
Hasta anoche el servicio de agua no había sido restituido. (Con información de Adán Astudillo/ Hidrobolívar)