El ex presidente del Gobierno español Felipe González dijo hoy que el miércoles viajará a Bogotá y que “probablemente el sábado” se trasladará a Caracas.
González, quien hizo estas declaraciones a la prensa tras reunirse en Bruselas con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, aplazó en mayo un viaje previsto a Caracas para defender legalmente a los opositores encarcelados Leopoldo López y Antonio Ledezma ante la postura del Ejecutivo de Nicolás Maduro de no facilitarle la entrada a Venezuela.
Según González, “Venezuela no es una dictadura, es una democracia que está ahogando las libertades”.
Reivindicó su derecho a opinar que “los venezolanos no se merecen este fracaso de la acción política y económica”.
El ex presidente del Ejecutivo español consideró que Venezuela “no cumple las reglas del juego” y pidió a los ciudadanos que voten en los próximos comicios porque así “se puede acabar con ese clima de presos políticos, desabastecimiento en uno de los países más ricos del mundo y problemas de inseguridad”.
Venezuela prevé celebrar elecciones legislativas este año, pero Caracas aún no ha anunciado las fechas.
“Ya sé que a Maduro no le gusta hablar de esos problemas reales, pero a él no le importa hablar de los desahucios en España y tiene derecho a hacerlo”, indicó González.
“El mismo derecho que tiene él lo tenemos los demás a opinar que los venezolanos no se merecen este fracaso de la acción política y económica ni el fracaso de las libertades” en ese país.
Respecto a las relaciones entre la UE y Latinoamérica, que la próxima semana celebran en Bruselas su cumbre bianual, Felipe González opinó que “Europa está muy descuidada respecto a la evolución de América Latina”.
Criticó que, mientras los sucesivos presidentes chinos han visitado ese continente diez veces en cinco años, “ningún dirigente europeo ha ido más de una vez”.
“¿Verán los chinos algo en América Latina que nosotros no vemos? Es la pregunta del millón”, añadió González.
Reconoció que Europa tiene sus propias tareas y debe seguir vigilando sus problemas internos, tras estimar que este continente “siempre ha sido un faro de defensa de las libertades, de la democracia y de los derechos humanos”.
“Sigue siendo la zona del planeta donde las condiciones de vida, de libertad y de derechos humanos son las más serias”, concluyó. EFE