El gobernador de Miranda, Henrique Capriles, desestimó los recientes ataques de voceros del Ejecutivo central en su contra. Argumentó que tales acciones evidencian que el gobierno quiere llevar la agenda electoral por un pantano, para intentar distraer la crisis que padece el país. Prensa Miranda/ Maria Carolina Naranjo
“El señor que debería ocuparse de la seguridad y los servicios públicos del municipio Libertador, presentó ayer (martes) una foto forjada mía. A esos extremos han llegado. Esto es una muestra del terreno fangoso a donde quieren llevar los próximos comicios electorales, pero no caeremos en su juego sucio. A este señor le digo una vez más que estoy dispuesto a realizarme una prueba toxicológica, yo no tengo vicios. Los reto a ellos a que se sometan a un detector de mentiras para que vean que no pasarían la prueba ante las preguntas que quisieran hacerles los venezolanos. Mientras ellos se caen a coba nosotros seguiremos organizando al pueblo para el cambio”.
Capriles aseguró que el gobierno tiene secuestradas las cifras de inflación y escasez, como estrategia para tratar de distraer a los venezolanos sobre el escenario de la crisis. “Terminamos junio y el Banco Central de Venezuela no publicó las cifras de inflación. Los venezolanos tenemos derecho a conocer esa cifra. Según información extraoficial nos dicen que la inflación va por 70% en lo que va de año, es decir, que para finales de 2015 podría alcanzar 150%, sentenció este miércoles el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, durante una Asamblea Popular en la parroquia Cartanal, municipio Independencia de Valles del Tuy.
Por otra parte, durante la jornada integral y social y entrega de obras comunitarias que se llevó a cabo en el sector Cardenal Tereseño, de la parroquia Cartanal, el Mandatario regional consideró insuficiente el ajuste al salario mínimo de los venezolanos, que entró en vigencia este miércoles 1° de julio. “Anunciaron con bombos y platillos un aumento salarial, pero el incremento diario es de 22 bolívares, que no alcanza ni para un café. Tenemos el sueldo mínimo más bajo del continente americano después de Cuba, no llega a 20 dólares. Calculen el salario a dólar real, porque el pueblo no tiene acceso al dólar a 6.30. Ese es un privilegio para los enchufados. Esa es la verdadera realidad de los venezolanos, que viven en el país con las reservas petroleras más grandes del planeta y que no merecen vivir en las condiciones que estamos viviendo”.