La alcaldesa del municipio Páez, separada de su cargo por decisión del Tribunal Supremo de Justicia, Lumay Barreto, denunció una situación irregular en el municipio Páez, cuando en la tarde de ayer funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana pretendían vender alimentos de primera necesidad a los damnificados en la entidad.
“Solo pasa en Venezuela, el Gobierno vende la comida a los damnificados. El agua también se llevó en Guasdualito la inclusión y el humanismo de la revolución. En una situación tan lamentable que viven los habitantes del Municipio Páez, donde producto de las inundaciones perdieron todo, el Gobierno tenga el atrevimiento de vender la comida, teniendo en cuenta que no hay bancos, por interrupción de la energía eléctrica, mucho menos dinero en efectivo ni dónde comprar porque los comercios de la parroquia Guasdualito están cerrados por estar anegados”.
Barreto afirmó que son horas de mucha angustia, indignación y desespero, en la que gobierno nacional y regional no han actuado para resolver la emergencia. “Este entorno desolador ha dejado escapar en los afectados, molestias, indignación y desespero de no tener alimentos hasta el límite de tomar un camión cargado de comida y repartirlo a todos los damnificados que se encontraban apostados frente a una unidad de Pdval, que estaban varias horas esperando les distribuyeran el mercado. La rabia encendió a los vecinos que estaban ubicados en los alrededores de la Plaza José Antonio Páez cuando se enteraron que les iban a vender los productos de primera necesidad, a lo que los vecinos expresaron que no tenían plata, no hay donde comprar. Los efectivos militares al ver que el pueblo con sus fuerzas se apoderaron del camión lanzaron perdigones al aire, sacaron sus armas e intentaron también llevarse detenidos a varios hombres, pero el pueblo no lo permitió. Los mercados oscilan en 700 y 1200 bolívares y lo más triste es que entre las aguas muchos han tenido que hacer las colas para adquirir una bolsita de PDVAL”.
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