Si este domingo fueran las elecciones parlamentarias, ¿Usted por quién votaría, por los candidatos del oficialismo o MUD? INDUCIDA
Como consultor le recuerdo a todos los candidatos a diputados o diputadas y jefes de campañas que las estrategias electorales empiezan en la biblioteca, es fuente primaria de información, sobre todo en lo referente a los datos histórico político, económicos y sociales del país, región o circuito en este caso que se desea estudiar, de los propios manuales y estudios de elecciones, de los mapas electorales, de los resultados obtenidos en las anteriores elecciones o de encuestas. Candidatos o candidatas, no olviden nunca que el diseño de las estrategias de su campaña electoral, se inicia visitando las hemerotecas, elemento éste muy significativo para que la memoria de los políticos, propios y extraños, no les juegue una mala pasada. Recordemos que uno es “dueño de sus silencios y esclavo de sus palabras”.
Los políticos de la MUD deben entender, “No hay campaña sin estrategia, no hay estrategia sin estudios de opinión”. La estrategia es el componente fundamental de la organización de una campaña electoral en el caso venezolano, comienza demostrar sus complejidades. Saber qué hacer, dónde, cómo y con quien es el objetivo a desarrollar por los estrategas de la MUD. Estrategia es pensar, es construir ideas. Ideas que deben estar orientadas a enfrentar un enemigo político sin escrúpulo como es el gobierno. Para nadie es un secreto que el oficialismo utilizará todos los medios para obstaculizar y enfrentar la intención de voto hacia la MUD.
La MUD sale favorita, no debe confiarse de su contendor que tiene astucia en mover los hilos del poder Estado para defender sus diversos intereses, son muchas las reflexiones y referentes para neutralizar la campaña oficialista… tiene significación en este momento histórico la analogía entre el concepto militar y las campañas políticas, esta última mucho más pacíficas, claro está, a pesar de que como dijo Winston Churchill, “la política es más peligrosa que la guerra, porque en la guerra sólo se muere una vez”.
En un momento electoral la brecha y la abstención son el tema fuerte o mejor dicho los desafíos que deben resolver todos los jefes de campaña o partidos políticos. La tendencia histórica de la abstención en las elecciones parlamentarias en nuestro país se mueve entre 45 % y 50%, un candidato a diputado opositor que tenga una brecha de hasta 10% no debe ilusionarse, según la lógica pudiera proyectarse su triunfo, sin embargo, todo va a depender de la estrategia de motivación, la naturaleza política, económica y social del contexto electoral y la maquinaria electoral que tenga su comando, es decir, contar con una buena brecha en la salida ante un gobierno que se lo jugará el topo por el todo, no asegura que el favorito gane.
Brecha y abstención, la primera es prudente atacarla a través de análisis facticos y científicos para visualizar sus fisuras a fin de consolidarla y la segunda se puede resolver con presupuestos epistemológicos de la psicología social y política que apunten a potenciar la motivación de ir a votar el próximo 6D. Los comicios parlamentarios venezolano serán un evento electoral que en muchos estados del país reflejan una clara intención de voto que se ubica sobre el 75% / 78%, porcentajes que pueden tener una comprensión, la gente quiere salir a sufragar por un cambio, datos develados según los últimos resultados de la mayoría de los estudios de opinión nacional, allí la angustia del gobierno y su sala situacional.
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