Cuatro efectivos resultaron lesionados durante un motín protagonizado por los privados de libertad en las Salas de Guarda y Custodia del Centro de Coordinación Policial del N° 2 de la Policía de Miranda, ubicada en Charallave, municipio Cristóbal Rojas. Así lo reseñó una nota de prensa de ese organismo.
El director presidente del referido cuerpo de seguridad estadal, comisario general Elisio Guzmán, indicó que los funcionarios fueron atacados cuando realizaban la requisa de rutina a los aprehendidos y de las instalaciones, donde permanecen recluidas 40 personas, el doble de la capacidad para la que fueron diseñadas dichas celdas.
Guzmán destacó que los detenidos destrozaron las paredes de una de las salas y agarraron los escombros para lanzarlos contra los funcionarios, lo que ocasionó que resultaran heridos cuatro uniformados y que el resto de las comisiones actuantes procedieran a controlar el orden del lugar.
Añadió que los oficiales heridos fueron llevados a un centro médico de la localidad. “Afortunadamente, los diagnósticos médicos confirman que sufrieron traumatismos leves en el talón, cráneo y cara, por lo que se encuentran fuera de peligro”, dijo.
Entre los detenidos que presuntamente agredieron a los policías e incitaron a los otros procesados a crear el caos vandálico se encuentran José Jiménez Valenzuela (21), Jesús Gutiérrez González (21); Wilkin Cordero Ruiz (31) y Yorkis Miguel Yánez (19).
El comisario Guzmán indicó que luego de controlar la revuelta, los 40 detenidos que permanecen en el Centro de Coordinación Policial del N° 2, iniciaron una huelga de hambre indefinida para solicitar su traslado a los penales del país.
Presos intentaron escaparse de sede de Santa Teresa
Otro hecho similar ocurrió en el Centro de Coordinación Policial N° 5 ubicado en Santa Teresa del Tuy, donde los funcionarios de dicha sede frustraron la fuga de 45 detenidos que se encuentran en los espacios de reclusión, en los que solo debería haber un máximo 20 individuos y quienes también exigen ser enviados a las cárceles nacionales, donde contarían con beneficios como visitas conyugales, actividades deportivas, entre otros.
Durante el intento de fuga los aprehendidos opusieron resistencia y atacaron a dos funcionarios del ente policial regional, ocasionándoles traumatismo en las manos.
“Es urgente que el Ministerio de Prisiones, agilice los traslados de los detenidos a los centros de reclusión en el país y no interpongan más trámites burocráticos, porque eso genera la congestión de nuestros calabozos. Actualmente tenemos 204 privados de libertad, en espacios destinados para albergar solo a 140 personas, por lo que estamos en medio de una situación de constante alarma, ante escenarios violentos como los ya descritos”, concluyó.