El volcán ecuatoriano Cotopaxi, que entró en proceso de erupción después de 138 años, arrojó este jueves una columna de ceniza de 1,5 km de altura, informó el ministerio Coordinador de Seguridad.
AFP
“Se registra emisión de ceniza, con altura de 1.5 km” con dirección al suroccidente del volcán, señaló en su cuenta de Twitter la cartera, única fuente autorizada a dar información sobre el fenómeno natural.
Agregó que las “poblaciones posiblemente afectadas (serían): Lasso, Mulaló, Pastocalle”, ubicadas en la provincia de Cotopaxi (norte).
En la mañana, el coloso también lanzó ceniza que fue visible desde varios puntos de Quito, una ciudad de 2,3 millones de habitantes y ubicada a 45 km del volcán.
Las autoridades no han reportado un cambio en el nivel de alerta, que se mantiene en amarilla, un nivel intermedio de riesgo.
El Cotopaxi, de 5.897 metros de altura, entró en un proceso eruptivo el viernes con varias explosiones y expulsión de importantes cantidades de ceniza, que obligaron a la evacuación preventiva o voluntaria de 505 personas el fin de semana.
A raíz de ello, el presidente Rafael Correa decretó el estado de excepción por 60 días, lo que le permite liberar fondos, movilizar a las Fuerzas Armadas para una eventual emergencia y censurar de manera previa la información relacionada exclusivamente con el volcán para, según el gobierno, evitar la propagación de rumores.
Desde el lunes la actividad del volcán se ha caracterizado por la expulsión irregular de pequeñas columnas de gas y ceniza, que no han alterado significativamente la situación de emergencia.
El Cotopaxi es considerado por los científicos uno de los volcanes más peligrosos del mundo por el alto número de habitantes que vive en sus alrededores, y el riesgo de que se formen avalanchas que bajen por los ríos que cruzan los poblados.
Según estimaciones de la secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, unas 325.000 personas que viven en las provincias de Cotopaxi, Napo y Pichincha -cuya capital es Quito- pueden verse afectadas por avalanchas derivadas del proceso eruptivo.