El Papa Francisco advirtió sobre el riesgo de que militantes radicales pudieran filtrarse en Europa en medio de la enorme ola de refugiados que huyen de la guerra en Siria, aunque también señaló que la crisis de inmigrantes podría ayudar a un despertar de la conciencia en el continente.Reuters
En una entrevista difundida el lunes por la emisora portuguesa católica Radio Renascenca, el Papa se refirió al riesgo de que Estado Islámico, que ha matado a cristianos y a miembros de otras minorías en Oriente Medio, pudiera lanzar ataques en Europa.
“Es verdad, también quiero reconocer eso; en este momento, las condiciones de seguridad territorial no son las mismas que las de otros períodos (de migración masiva)”, dijo Francisco durante la entrevista.
“Lo cierto es que a apenas 400 kilómetros de Sicilia hay un grupo terrorista increíblemente cruel. Por lo tanto, hay un riesgo de infiltración, eso es verdad”, agregó el Papa.
Especialistas en seguridad han señalado que el riesgo de que militantes puedan infiltrarse en Europa de esta manera es bajo.
Consultado sobre si Roma podría ser blanco de un ataque, Francisco dijo: “Sí, nadie dijo que Roma sea inmune a esta amenaza. Pero uno puede tomar precauciones”, agregó.
Militantes de Estado Islámico han amenazado públicamente blancos católicos en Roma y se han incrementado las medidas de seguridad en el Vaticano y en otras zonas religiosas en Italia que reciben a miles de peregrinos y turistas.
El 6 de septiembre, el Papa apeló a que cada parroquia, cada comunidad religiosa y cada santuario en Europa albergue a una familias de refugiados, y agregó que él impartiría el ejemplo albergando a dos familias dentro de la Santa Sede.
“Estas personas pobres están huyendo de la guerra, del hambre, pero esta es la punta del iceberg. Porque debajo de eso está la causa, y la causa es un sistema socioeconómico malo e injusto”, reflexionó Francisco.
Al ser consultado sobre si la crisis de refugiados podría ser una ocasión positiva para Europa y un nuevo despertar de la conciencia en el continente, el Papa dijo: “Podría ser”.