Recuerdo aquel programa Alo Presidente #300 cuando Chávez sorpresivamente calificó los peajes de vías interurbanas y del puente sobre el lago como prácticas capitalistas: “Eso es el neoliberalismo y el capitalismo que privatizan las carreteras”, en consecuencia ordenó la eliminación del cobro de esos peajes ¿Estará el modelo del “socialismo del siglo XXI” reñido con la eficiencia y calidad de los servicios públicos?
Allí comenzó el deterioro de esas vías y quiero referirme en especial al Puente sobre Lago de Maracaibo “Rafael Urdaneta”. A pocos días de esa decisión comenzó el abandono de la obra. Desaparecieron los servicios gratuitos de auxilio vial, grúas y patrullaje las 24 horas del día durante todo el año. Igual ocurrió con los teléfonos de emergencia a lo largo del puente y que estaban a disposición de los usuarios.
Las cámaras de video vigilancia fueron desmanteladas e igual desapareció el barrido que se hacía en horas nocturnas para no afectar a la ciudadanía. Si nos gobierna el mismo modelo político ¿por qué el cambio de opinión? ¿Será Maduro vs Chávez? ¿Quién responderá por el daño patrimonial causado por el deterioro de toda una infraestructura? ¿Quién va resarcir los daños y molestias ocasionadas a tantos usuarios?
Acabaron con los planes de mantenimiento cuando desaparecieron el programa de reparación y cuidado permanente de pilas y fustes. Igual había una política de sustitución de barandas destruidas que se reemplazaban en menos de 24 horas, pero hoy en día tardan mucho tiempo para su cambio. Pasaron a la historia aquel sistema de iluminación y alumbrado en óptimas condiciones, los pórticos de señalización iluminados, incluyendo el show de luces como atractivo turístico adicional.
Las guayas se evaluaban trimestralmente y se planificaban su reemplazo en caso de ser necesario. También desaparecieron las actividades culturales en el complejo “Conoce tu puente” donde había exposiciones de los mejores pintores y artistas, grupos gaiteros enseñando a niños y adultos complementado con escuelas de juegos tradicionales y ventas de souvenir. A los trabajadores se le daban beneficios acordes con la responsabilidad que ello significaba, todos superaban el sueldo mínimo y además disfrutaban del servicio privado de hospitalización, cirugía y maternidad.
¿Quién engañó a quién? ¿Se puede seguir gobernando casuísticamente? Quienes aplaudieron como focas aquel anuncio errático de Chávez como el Gobernador Francisco Arias Cárdenas, hoy aplauden el anuncio de Maduro ¿Cómo una clase política puede tener y ejercer acciones diferentes para una mismas situación? Sufren un grave problema existencial. Por eso estamos como estamos.
@DanielPonne