El gobernador de Bolívar, Francisco Rangel Gómez, pidió al pueblo -durante su programa radial de este martes- no “caer en la tentación” ni molestarse por no conseguir un paquete de harina de maíz o una sardina en un contexto de elevada escasez.
“Tengamos mucho cuidado, que nos quiten lo que les dé la gana, nosotros somos capaces de comer palo o tirar en vez de dos huevos, dos piedras y nos comeremos las piedras fritas, pero a nosotros no nos doblega nada ni nadie”, dijo, volviendo en la tesis de la guerra económica y la inflación inducida “que ha disparado los precios al cielo, contra eso debemos luchar todos juntos, que no sientan ellos que nos están doblegando”, arengó el gobernador.
Según el Centro de Investigaciones para la Educación, la Productividad y la Vida de la Universidad Católica Andrés Bello (Ciepv-UCAB Guayana) la escasez alcanzó a 51,08% en San Félix.
En Ciudad Guayana, los cálculos del Ciepv indican que la canasta alimentaria escaló a Bs. 44.963 en agosto, de modo que una familia de Ciudad Guayana debe gastar Bs. 11.240 en la compra de alimentos, es decir, más de un salario mínimo, fijado actualmente en Bs. 7.421,67.
“Nadie nos puede doblegar, nosotros somos los hijos de Bolívar, tenemos la misma sangre”, dijo, al mencionar obras en los municipios del sur para -aseguró- mejorar la calidad de vida de la gente.
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