Desde hace ya varios años, Noam Chomsky es un referente para la izquierda de muchos regímenes a nivel mundial. Es así que, hasta no hace mucho, era considerado un aliado por gobiernos como el de Hugo Chávez. De hecho, ambos mostraron públicamente su admiración y el intelectual estadounidense fue siempre un invitado ilustre para el chavismo.
Martín Higueras | Libertad Digital
En una de sus visitas a Caracas, en el año 2009, Chomsky declaró que en Venezuela se estaba “construyendo ese otro mundo posible” y agregó que “hablar de la paz es, de alguna manera, fácil (…) lo difícil es crear un nuevo mundo, un mundo diferente“. Además, dijo que estaba emocionado de encontrarse con Chávez, quien a su vez dijo que se trata de “uno de los intelectuales que más ha abonado en la lucha contra la hegemonía de la elite que gobierna en EEUU“. La cercanía era tal que Chávez incluso llegó a recomendar en 2006 un libro de Chomsky en la Asamblea General de la ONU. Se trata de ” Hegemonía o supervivencia: La búsqueda de Estados Unidos para lograr el dominio mundial”. El venezolano dijo que los estadounidenses deberían leer esa obra “en lugar de ver películas de Superman“.
Hoy la sintonía entre Venezuela y Chomsky no parece ser la misma y es así que en una entrevista para Perfil.com señaló que “en América Latina, creo que el modelo de Chávez ha sido destructivo“, algo muy diferente a lo que señalaba hace apenas 6 años y que fue utilizado como gran impulso para el chavismo para seguir con sus planes. A nivel regional, –en la misma entrevista al portal argentino– opinó que “la corrupción fue tan grande en Sudamérica que se desacreditaron a sí mismos“. Ahora, apunta, en Venezuela “donde hubo propuestas significativas, esfuerzos, iniciativas, pero en un sistema que estaba un poco desbalanceado desde el principio no se puede“.
Explicó que “hubo varios cambios instituidos desde arriba, bastante poco relacionados con la iniciativa popular, con algo de participación, pero no: venían desde arriba principalmente. Es poco probable que eso funcione“. “Hubo muchos fracasos en el camino después -agrega-, pero en este momento, de nuevo, la tremenda corrupción y la incompetencia del país nunca lograron liberarse de la dependencia casi total de una exportación única, el petróleo“.
Sin embargo, el cambio de postura de Chomsky comenzó hace ya un par de años. En una entrevista a Infobae en mayo de 2013 dijo que “yo nunca apoyé a Chávez, lo único que hice fue decir que Venezuela tenía que ser dejada tranquila para que pueda imponer sin intervención extranjera sus propias políticas económicas“. También apuntó entonces que “algunas de las cosas que hizo Chávez me parecen razonables, otras no y las critiqué mucho en su momento” y aclaró que “debo haber sido uno de los mayores críticos de Chávez internacionalmente“, algo que sin duda nunca fue percibido por la opinión pública.
Al que no le han gustado las últimas declaraciones de Chomsky fue a Nicolás Maduro. Por eso, lo invitó al país para conversar e informarle sobre la “nueva realidad” del país: “Yo creo que Noam Chomsky no está bien informado, es un buen hombre Noam Chomsky, pero por allí salió una entrevista supuestamente de él, y yo le dije a la canciller que es bueno conseguir el contacto de Noam Chomsky y conversar con él un rato (…) porque yo creo que está mal informado“. Incluso dijo que “de pronto solo se informa con CNN o con algunas publicaciones estadounidenses“.