La española Garbiñe Muguruza, número tres mundial y que el pasado fin de semana perdió las semifinales individuales y la final de dobles del Masters, le pide a 2016 “más equilibrio en muchos aspectos”.
Finalista en Wimbledon y una de las sensaciones de la temporada, Garbiñe espera que la experiencia de esta temporada le sirva para mejorar sus prestaciones de futuro. “Ojalá pueda tener un año más equilibrado en muchos aspectos”, ha dicho hoy a su llegada a Barcelona.
Considera que 2015 es un año para recordar. “El balance es genial, he tenido momentos buenos y no tan buenos, pero hay más cosas positivas que negativas, pero este final de año ha sido muy emocionante”, ha asegurado.
Admite que tiene que mantener este nivel exhibido a finales de año durante todo el curso. “Me faltan muchas cosas por mejorar. He ido muy rápido, pero tengo que mantener este nivel durante más tiempo”, ha insistido.
Muguruza admite que es “muy importante” recuperarse de los momentos de bajón que ha tenido. “Es difícil, en tenis tienes que tener mucha exigencia”, ha dicho la española, quien asegura que ha sido capaz de “darle la vuelta” a la situación y volver a su mejor nivel.
Del exitoso 2015, Garbiñe Muguruza se queda con un momento: la final de Wimbledon -perdida ante Serena Williams-. “Es algo muy especial, un Grand Slam. De esa final me acordaré siempre”, ha dicho.
También se ha referido a lo mucho que ha mejorado su juego individual al compatibilizar los torneos individuales con los dobles junto con Carla Suárez, con quien llegó hasta la final del Másters.
“El doble me ha ayudado mucho. Con mi compañera Carla dijimos que jugaríamos dos años a tope. Me ha ayudado mucho para subir a la red, mejorar la volea, los reflejos… Ha sido una inversión jugar el doble”, admite.
En todo caso, Muguruza asegura que compatibilizar individuales y dobles es “cada vez más complicado”, porque la exigencia en individuales es muy alta.
“Mantenerse en los dos cuadros y en todos los torneos va a ser complicado, pero vamos a intentar clasificarnos para (los Juegos de) Río que nos hace muchísima ilusión. Veremos a ver”, ha comentado.
Sonríe cuando se le pregunta por el apodo en el que sus rivales empiezan a conocerla en el circuito mundial -‘La bomba’- y dice que es mejor que le pongan ese nombre que otro. “Significa que no les gusta tanto jugar conmigo y que me tienen fichada”, ha dicho.
Su futuro pasa por ser más regular. “En deporte lo difícil es mantenerse y hay que saber manejarlo, así que desde luego es lo que voy a intentar”, ha argumentado.
“Para 2016 pido que lo vivido este año me haya servido para aprender de muchas de las cosas que me han pasado para que no me pasen el año que viene. Ojalá pueda tener un año más equilibrado en muchos aspectos, pero está claro que cada año que pasas en el circuito sabes elegir mejor las situaciones”, insiste.
Cuenta Muguruza que en el tenis femenino se producen “muchos cambios y bastante grandes” y desconoce si en 2016 será capaz de ganar un Grand Slam o de encaramarse a la primera posición Mundial.
Mientras acaba una temporada, Garbiñe Muguruza ya piensa en la siguiente. Recién llegada de Singapur, ahora descansará unas semanas y pondrá en marcha su nuevo proyecto, con una idea diferente. La pretemporada la realizará en California, allí cargará las pilas para preparar su estreno en Australia. EFE.