Funcionarios de la Policía de Miranda frustraron la fuga de dos privados de libertad, de 30 y 31 años de edad, de la Sala de Guarda y Custodia del Centro de Coordinación Policial N° 2, ubicado en Charallave, municipio Cristóbal Rojas.
Iapem Prensa / Egda González
Según la información suministrada por el director-presidente del referido cuerpo de seguridad estadal, comisario general Elisio Guzmán, los detenidos abrieron un boquete en una de las celdas, tras desprender dos bloques de la reja de ventilación. Luego lograron escabullirse hacia otra área interna de la sede, donde fueron recapturados por los funcionarios.
Persiste situación de hacinamiento
Guzmán reiteró que en las Salas de Guarda y Custodia de la Policía de Miranda se mantiene una alarmante situación de hacinamiento. “Desde hace dos años existe una sobrepoblación de detenidos debido al retardo procesal del sistema de justicia y por las deficientes políticas carcelarias por parte del Ministerio de Prisiones”, dijo.
En este sentido afirmó que actualmente la policía regional tiene 204 aprehendidos, cuando sus estructuras están diseñadas para un máximo de 140 personas. “El centro de coordinación 2 tiene 42 detenidos y sólo deberíamos albergar a 20 privados de libertad. Esta gran diferencia deja entrever el desespero de los recluidos por tener que convivir en espacios reducidos, lo que los insta a ponerse violentos o a querer recurrentemente escaparse”, sentenció.
En la misma situación se encuentran los calabozos de otras sedes policiales como la de los Altos Mirandinos, donde permanecen tras las rejas 57 apresados. El resto de los centros de coordinación están en las mismas condiciones de hacinamiento. “Es urgente que el Ministerio conceda los cupos que requerimos para despejar los calabozos, con el fin de mejorar la situación de los detenidos, evitar fugas, motines o huelgas de hambre”.
Por último añadió que “el Gobierno Central debe propiciar el trabajo mancomunado entre los cuerpos de seguridad, las fiscalías, los tribunales y los ministerios a cargo de la justicia y las penitenciarias. Hay un divorcio entre todas estas instituciones que está causando que hayan más delincuentes en las calles, que tengamos más policías cuidando a presos en lugar de la ciudadanía, que es la que padece la criminalidad e impunidad que existen en el país”, concluyó Guzmán.