Este miércoles el presidente, Nicolás Maduro a manera “simbólica” decidió subir a un autobús para inaugurar el sistema de Bus de Tránsito Rápido (BTR) Cayaurima en el estado Anzoátegui.
Mientras Maduro estaba al volante, los seguidores oficialistas desesperados y en medio del desorden hacían esfuerzos por pasarle a Nicolás”peticiones” en carpetas y papeles para mendigarle “algo”.
Quizás una casa, una ayuda económica… O comida.
Tanto fue el despelote que en una oportunidad se puede observar como el mismo presidente saca con sus propias manos los brazos de su pueblo desesperado de la ventana del autobús.
El canal del Estado, (como siempre) trataba de disimular lo inocultable con diversas tomas de personas en otros puntos. Pero al volver la cámara hacia Nicolás se podía notar la situación.
Definitivamente es el Gobierno del pueblo que se acostumbró a ser “mendigo”.