Amnistía Internacional pidió, a través de un comunicado, la restitución de las relaciones con la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por parte del gobierno Venezolano.
La organización también solicitó a la Corte Interamericana monitorear la situación de los defensores de derechos humanos en Venezuela, quienes son víctimas de hechos violentos incitados por representantes del gobierno venezolano, a través de los medios de comunicación.
Amnistía informó que en una audiencia con la CIDH expusieron los casos de dirigentes de derechos humanos agredidos, como son los de: Marino Alvarado, Horacio Giusti, miembro del Foro Penal, y Víctor Martínez, entre otros.
Entre las solicitudes para solventar la coyuntura, también la Organización propone la realización de un informe con la asistencia de un Relator Especial y la realización de un estudio en el que se analice las instigaciones verbales del Estado hacia Amnistía Internacional.
Marcos Gómez, director de Amnistía Internacional Venezuela, expresó en la audiencia que no se es posible que haya justicia para las violaciones de derechos humanos hasta que no se valore una defensa apropiada.
“No se podrán detener las desviaciones de funcionarios que se vinculan con abusos de derechos humanos en el presente, si no se protege a los defensores de derechos humanos y a las víctimas”, concluyó.