Samra Kesinovic, una adolescente austriaca de 17 años de edad que se marchó de su país para viajar a Siria y unirse al Estado Islámico, ha muerto a golpes por miembros de este grupo al intentar huir de la ciudada de Al Raqa, según ha informado el diario británico The Independent.
Samra Kesinovic viajó a Siria en 2014 junto a su amiga Sabina Selimovic, de 15 años. “No nos busquéis. Serviremos a Dios y moriremos por él” , fue la nota que dejaron a sus padres.
Las dos jóvenes, que fueron utilizadas por el grupo para sus campañas de propaganda, “fueron entregadas en matrimonio” a combatientes locales y se cree que quedaron embarazadas.
Los padres de las jóvenes aseguraron que habían logrado comunicarse con ellas y que querían volver . Sin embargo, en diciembre del año pasado, un experto en antiterrorismo de Naciones Unidas indicó que una de las dos jóvenes había muerto, quien podría ser Selimovic.
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