El parlamento en Venezuela, que por primera vez en 16 años está controlado por la oposición, planea investigar la salud financiera de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y los préstamos a cambio de crudo que acordó el gobierno socialista con China, dijo a Reuters un legislador.
Tras el cambio de fuerzas políticas en la Asamblea Nacional este mes, los rivales de Nicolás Maduro se proponen exigir una mejor rendición de cuentas de la principal compañía estatal PDVSA, que aporta la gran mayoría de las divisas de la nación por la venta de petróleo.
“Queremos indagar sobre cuál es la verdadera situación contable de PDVSA”, dijo Elías Matta a Reuters, un diputado opositor que asumió la vicepresidencia de la comisión de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional. “El país quiere saber cómo se gastaron los recursos que ingresaron a través de los fondos chinos. También tenemos que investigar cuál es el verdadero costo del barril de petróleo. Y por qué no han hecho los aumentos de producción que tanto se plantearon. Hay mucho trabajo en esta comisión”, agregó Matta.
China, gracias a un esquema acordado por el fallecido presidente socialista Hugo Chávez hace ocho años, se convirtió en el principal financista de Venezuela al otorgar préstamos por unos 50.000 millones de dólares que son pagados con petróleo.
El acuerdo de financiamiento con el gigante asiático le sirvió al gobierno socialista para compensar la caída de ingresos en divisas que sufre tras el desplome de los precios del crudo, pero comprometió las finanzas de PDVSA, que debe destinar una parte de sus envíos para el pago de los préstamos. Con menos margen de maniobra, la estatal petrolera no ha logrado aumentar una producción de petróleo que se ha estancado en la última década, en un país que cuenta con las mayores reservas de crudo en el mundo, según reportes de la Administración Información de Energía de Estados Unidos.
El gobierno socialista asegura que su producción de crudo es mayor a lo que indican los informes y defiende los planes de la compañía estatal, en asociación con socios extranjeros, para apuntalar las exportaciones de petróleo con inversiones en el mayor reservorio de crudo pesado del país.
Desde septiembre de 2014, se produjo un cambio en la gerencia de PDVSA, que pasó a ser presidida por Eulogio Del Pino, un ingeniero educado en la universidad de Stanford, que a juicio de algunos analistas, podría adelantar reformas para reducir la burocracia en la industria petrolera.
“Creo que en algún momento el presidente de PDVSA tendrá que venir a la Asamblea y a la comisión para resolver algunos temas importantes”, dijo Matta, quien es oriundo del occidental estado Zulia, una región petrolera en la frontera con Colombia. Es posible, añadió Matta, que la oposición intente llevar al parlamento a Rafael Ramírez, quien presidió PDVSA durante una década y quien ahora cumple funciones como embajador de Venezuela ante las Naciones Unidas en Nueva York. “Queremos una industria petrolera sana, una industria petrolera que nos genere recursos que tanto nos hacen falta”, dijo el diputado.
Por Alexandra Ulmer/Reuters