Zinedine Zidane, técnico francés del Real Madrid, dirigió este viernes un entrenamiento marcado por el protagonismo del balón y por la presencia de toda la plantilla, a excepción del lesionado Gareth Bale.
EFE
El jugador galés fue el único de los 23 jugadores del Real Madrid que no saltó al césped de la Ciudad Deportiva de Valdebebas. Bale continúa con su proceso de recuperación, tras lesionarse durante el partido este último domingo ante el Sporting y no podrá viajar a Sevilla para enfrentarse al Betis.
El resto de los futbolistas blancos estuvieron a las órdenes de Zidane, incluido Sergio Ramos, que culminó su segundo entrenamiento completo de la semana junto al resto de sus compañeros. El defensa sevillano ha superado sus molestias en el sóleo derecho que le impidieron enfrentarse al Sporting, y ya está listo para ocupar un hueco en el centro de la defensa.
Además, Cristiano Ronaldo y Kiko Casilla, que también alternaron a principio de semana entrenamientos en el interior de las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, volvieron a estar sobre el césped por segunda jornada consecutiva.
Zidane dio mucho protagonismo al balón, en una sesión en la que participó el canterano Marcos Llorente. Aunque el entrenamiento comenzó con ejercicio físico, después los jugadores de campo hicieron diversos ejercicios al primer toque y varias series de posesión de balón y presión, algo en lo que está incidiendo mucho el técnico francés.
Después, con los porteros integrados en el grupo después de completar sus ejercicios específicos, todos los jugadores realizaron serios de disparos a portería, centros y remates.