La toma por parte del gobierno de la empresa Agroisleña en 2010, para convertirla en Agropatria, es una de las principales causas del desabastecimiento: los productores dejaron de conseguir con la misma regularidad semillas, fertilizantes y maquinaria lo que se tradujo en una caída de la producción nacional, coinciden representantes gremiales y diputados de la Asamblea Nacional que llevaron ayer el caso a la plenaria.
María Fernanda Sojo/El Nacional
En este momento, poco más de 5 años después de la expropiación, se necesitan al menos 3,5 millardos de dólares para recuperar la empresa que financiaba 84% de toda la producción nacional con el suministro de semillas, fertilizantes y brindando capacitación a los productores, afirmó Claudio Motolongo, uno de los pequeños accionistas de Agroisleña.
Después del foro De Agroisleña a Agropatria, organizado por Cedice Libertad, Motolongo explicó que la situación de la empresa actualmente es muy confusa. Recordó que pese a que se les quitaron todas las propiedades, en ningún momento se les ha pagado nada por los activos entre los que se encuentran silos con una capacidad de almacenamiento de 1,4 millones de toneladas de cereales.
“En este momento estamos pasando por un vacío jurídico. Uno de los principales problemas es el pasivo laboral. Agroisleña tenía una nómina de 1.700 a 2.000 trabajadores que pasó a más de 7.000 trabajadores cuando se creó Agropatria. Para recuperarla habría que crear una empresa mixta, se tomaría entre 3 y 5 años”, dijo.