El dirigente del partido Voluntad Popular en Carabobo, Salvatore Lucchese, dijo este lunes no tener la menor duda de que en un corto tiempo podría estarse produciendo la salida del primer mandatario nacional por la vía pacífica y democrática, pues los acontecimientos históricos que está enfrentando el país indican que, de intentar mantenerse amarrado al poder, Venezuela podría entrarse precipitando hacia una espiral de violencia sin precedentes.
Nota de prensa
Lucchese indicó que factores como la inflación galopante, el desempleo, el alto costo de los alimentos y servicios, el desabastecimiento de comidas y medicinas, los altos índices de criminalidad reinante en las calles, sumados a la inacción del gobierno, a la falta de políticas claras para salir de la crisis, a la ineptitud de quienes dirigen al país, a la improductividad del sector empresarial por falta de divisas, más la caída de los precios petroleros, conjugan una ecuación muy peligrosa que podría desencadenar sucesos no deseados como los vividos durante el caracazo.
“No existe un solo sector en nuestro país que se encuentre marchando correctamente. Por donde miremos encontramos corrupción, paralización y caos. Los sectores alimentos, salud, farmacéutico, industrial, eléctrico, petrolero, automotor, turismo, entre muchos otros, se encuentra prácticamente paralizados -o en el piso- por culpa de quienes quisieron experimentar con nuestro pueblo una utopía macabra, que hoy ha convertido a nuestro país en un claro ejemplo de lo que no deben ser las políticas públicas y la dirección del estado, pero lo peor aún, han colocado en situación de riesgo la vida de todos los venezolanos cuando se avizora en el horizonte una tragedia humanitaria producto de la escasez de alimentos y medicinas”.
Lucchese recordó que desde el año 2014 Leopoldo López había visto la posibilidad de que, debido a la insistencia del régimen de profundizar el modelo político fracasado del Socialismo del Siglo XXI, el país podría entrar en corto tiempo en una emergencia humanitaria, situación que hoy, dos años después, pocos ponen en duda.
“Hoy a ningún factor de las fuerzas democráticas del país le queda la menor duda que la solución a la crisis que vivimos pasa por la salida constitucional y pacífica de Nicolás Maduro, esa salida democrática que anunció Leopoldo López, amparado en la Constitución, y que el gobierno se encargó de mal interpretar –intencionalmente- para justificar acciones antidemocráticas contra la disidencia, como la que posteriormente vimos hacia políticos, estudiantes y sociedad civil en general”.
El dirigente de VP Carabobo, aplaudió que líderes como Capriles Radonski, hoy se hayan sumado a la tarea de propiciar la salida de Maduro por los diferentes mecanismos que establece la Constitución (la renuncia, la enmienda, la reforma, entre otras), con la finalidad de restituir las libertades conculcadas por el régimen para restablecer la vigencia plena de las instituciones democráticas y los derechos humanos, y así lograr la paz y el avance que requiere el país.
“Indistintamente del mecanismo que quiera activarse, de todos los que establece claramente la Constitución de la República, lo importante es que todos han entendido que es imperioso consolidar la salida democrática de Nicolás Maduro para abrir paso a la transición hacia esa mejor Venezuela de la que habla Leopoldo López, donde se restablezcan plenamente los derechos democráticos para todos, donde se rescate la autonomía de los poderes públicos del estado, donde reconstruyamos todos juntos la Venezuela de la paz, del progreso y del desarrollo”.
Agregó que otra de las razones por la cual no le queda la menor duda de que al régimen le queda poco tiempo, se debe a que diferentes grupos políticos del mismo chavismo han pedido la renuncia al primer mandatario, incluso sectores del componente militar.
“En el chavismo hay mucha gente pidiendo la salida de Maduro. Este fin de semana, fue noticia que componentes de la Fuerza Armada están haciendo un llamado a defender la voluntad de cambio manifestada por el pueblo, obviamente no es el alto mando militar al servicio del régimen de Miraflores, son los militares que han sabido mantener su honor y que, igual que los demás venezolanos, padecen la crisis que todos vivimos y sienten indignación por la podredumbre en la que se ha convertido el ejercicio del poder en Venezuela”.