Durante el rescate de una cría de rinoceronte sudafricano, cuya madre fue asesinada por cazadores furtivos, seis sudorosos hombres subieron al sedado espécimen a un helicóptero al que le retiraron asientos y puertas, según narró un testigo. El rinoceronte salía un poco de la aeronave, pero el traslado improvisado realizado en febrero fue todo un éxito.
Por CHRISTOPHER TORCHIA, Associated Press
Días después, un equipo de The Associated Press vio al tambaleante rinoceronte en su corral en Hluhluwe-iMfolozi, una zona de vida silvestre cuya tradición como refugio de estos enormes animales contrasta con el oscuro panorama de la especie, que ha sido masacrada en cifras históricas para satisfacer la demanda de sus cuernos en partes de Asia, especialmente en Vietnam.
La desorientada cría, que en cierto punto chocó contra la puerta del corral, podríaf pasar un par de años bajo cuidado humano hasta que sea lo suficientemente resistente para volver a estado salvaje. Ese es el objetivo de los conservacionistas cuyos predecesores perseguían a caballo o en vehículos a los rinocerontes para sedarlos con dardos.
La historia de éxito en Hluhluwe-iMfolozi, el último reducto de rinocerontes blancos del sur desde hace un siglo, y reserva genética para distribución del excedente de especímenes para otras partes del continente y zoológicos de occidente, es una señal de esperanza entre los grupos que buscan una fórmula para combatir la caza furtiva. A finales del siglo XIX, se estimaba la existencia de menos de 100 rinocerontes de esa especie, debido a la caza incontrolada, lo que representaba una crisis muy similar a la que existe actualmente.
“Estaban donde estamos ahora, en una situación desesperada, con la espalda contra la pared”, dijo Werner Myburgh, director ejecutivo en jefe de Peace Parks Foundation, un grupo que promueve las zonas de conservación transfronterizas.
Hoy en día, existen cerca de 20.000 rinocerontes blancos del sur, la mayoría de ellos en Sudáfrica. De la subespecie del norte solo existen tres rinocerontes blancos en el mundo, todos ellos habitantes de una reserva en Kenia. Mientras que el rinoceronte negro, seriamente amenazado, se ubica alrededor de los 5.000 especímenes. Otros rinocerontes en peligro de extinción habitan en algunas partes de Asia. AP