Si te identificas con estas expresiones: ¡No puedo más! ¡Mi empleo me está matando! , probablemente sufres de estrés laboral o síndrome de burnout, publica mercadodedinerousa.com.
Entre todas las tareas diarias del trabajo, el estrés puede llegar. No siempre es fácil llevar múltiples proyectos, mantener buenos resultados o, incluso, realizar trabajo extra… peor aún: terminar el trabajo en casa y contestar emails en vez de dormir.
Sentir que a veces ya no tenemos la misma claridad para pensar y que hemos perdido la alegría por realizar aquellas cosas que antes nos causaban tanto bienestar, no es otra cosa que un cansancio mental y físico.
El término inglés síndrome de burnout, que se traduce como estar ‘quemado’ por las actividades que una persona realiza. Por lo general se liga al aspecto profesional, sobre todo a quienes se desenvuelven en actividades en las que hay un contacto directo y constante con otros individuos, así como en profesiones que exigen un alto grado de responsabilidad.
Si el estrés cotidiano no se controla, este estilo de vida puede derivar en un síndrome muy especial: el burnout; es decir, irritabilidad, dificultad para tomar decisiones, cansancio extremo, problemas gastrointestinales, insomnio, dolores de cabeza, taquicardia y nerviosismo.
En el estudio reseñado en el portal Dinero en Imagen, se encuestaron a 1,386 profesores de aproximadamente 40 años en 18 estados de la Unión Americana; y estas personas, que se han dedicado a su profesión un promedio de 14 años, arrojaron resultados más que interesantes.
Se les administraron cuestionarios tanto para diagnosticar depresión, como para saber si padecían burnout. Los investigadores encontraron que 10% de las mujeres y 7% de los hombres sufrían burnout; asimismo 10% de los hombres y 10% de las mujeres probablemente padecían depresión.
Sin embargo, lo interesante son los patrones que presentaron quienes padecían burnout: se encontraron de moderados a severos síntomas de depresión entre este grupo. Aún más revelador es el hecho de que cada persona que reportaba padecer burnout, también presentaba síntomas de depresión.
Siga leyendo en mercadodedinerousa.com