El Sindicato Único de Automóviles con Taxímetro y Telefonistas (Suatt) de Uruguay inició hoy un nuevo paro general después de que falleciera un conductor que permanecía hospitalizado desde que fue asaltado el pasado mes de febrero en Montevideo, informaron a Efe fuentes oficiales.
EFE
Se trata del segundo paro general que realiza la gremial de taxistas del país en los últimos siete días, pues la semana pasada el sector también protestó sin prestar servicio por el asesinato de otro de sus compañeros, víctima igualmente de un robo.
Entonces, la Unión Nacional de Obreros y Trabajadores del Transporte (Unott), que aglutina el servicio de autobuses, se sumó a la medida de los taxistas y paralizaron la ciudad de Montevideo, los desplazamientos entre departamentos (provincias) del país y a destinos internacionales.
En esta ocasión, el Suatt paró a las 14.30 hora local (17.30 GMT) y seguirá sin prestar servicio hasta que este jueves sea el sepelio del compañero fallecido -aún sin hora definida-.
De inmediato, el paro fue secundado por el servicio de autobuses urbanos de Montevideo, que se sumó a la medida durante 24 horas, contó a Efe el presidente de la Unott, Oilcar Camaño.
Poco después, se adhirieron también a la medida las compañías de autobuses que realizan rutas suburbanas, interdepartamentales e internacionales, dijo a Efe el presidente de la Coordinadora de Transporte Interdepartamental de la Unott, Juan Arellano.
Las mismas pararán a partir de las 00.00 hora local (03.00 GMT).
Arellano, no obstante, añadió que las empresas que no forman parte de la Unott y que realizan trayectos internacionales brindarán servicio normalmente.
Como medida sindical para intentar lograr una solución a sus problemas de inseguridad, los taxistas mantenían desde el pasado sábado una huelga nocturna entre la medianoche y las 06.00 de la mañana.
A ello se suma el paro general decretado hoy, más una serie de medidas para exigir soluciones a los problemas de inseguridad que vive el sector, que culminarán con la paralización en la medianoche del domingo de la principal estación de autobuses de Montevideo, y que también habían iniciado hoy antes del fallecimiento del conductor.
El Ministerio del Interior uruguayo y la Gremial Única del Taxi -la patronal- acordaron el pasado lunes la instalación de un ‘botón del pánico’ que conecte cada vehículo con la central de emergencias ante posibles situaciones de violencia.
Los taxistas consideran que esta medida no es suficiente ante los últimos episodios de violencia ocurridos en el sector.