El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dijo hoy que ver políticos implicados en el escándalo de evasión fiscal de los “papeles de Panamá” deja un gran “sinsabor” y obliga a tomar medidas urgentes.
EFE
“Que políticos estén utilizando estos mecanismos lo deja a uno verdaderamente con un sinsabor más grande y con la necesidad de aplicar soluciones para esto (la evasión fiscal) de manera más urgente”, dijo hoy Almagro en declaraciones a los periodistas en Washington.
El titular de la OEA se pronunció en este sentido tras ser preguntado por el escándalo de los “papeles de Panamá”, una masiva filtración que ha destapado miles de empresas y activos opacos de personalidades de todo el mundo y de distintos ámbitos.
“Me preocupa todavía más cuando se utiliza por parte de políticos, porque tienen una responsabilidad con la sociedad”, subrayó Almagro.
“La evasión fiscal es algo que le cuesta a los países en términos sociales, en programas, en proyectos, por tanto esta es una práctica que debería ser desterrada del continente”, agregó.
El escándalo abarca más de once millones de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca, especializado en la gestión de capitales en paraísos fiscales, y afecta a más de 140 políticos y altos funcionarios de todo el mundo, entre ellos varios jefes o ex jefes de Estado, o a sus familiares.
“Esperamos que el mundo, que en general cambió bastante desde 2008 con la crisis financiera de Lehman Brothers, pueda seguir haciendo cada vez más a los efectos de restringir la circulación o la utilización incluso por sistemas bancarios de fondos provenientes de la evasión fiscal fundamentalmente o incluso de fraude fiscal”, afirmó Almagro.
“Como nos oponemos a su utilización en términos de dineros o recursos financieros provenientes del narcotráfico o de cualquier otra actividad ilegal”, añadió.
La primera víctima del escándalo ha sido el primer ministro islandés, Sigmundur David Gunnlaugsson, quien presentó hoy su dimisión, ante fuertes presiones de la oposición y de la calle, tras las filtraciones que lo vinculan con una empresa en un paraíso fiscal.
Otra de las víctimas está siendo Panamá, país de origen del bufete implicado y al que hoy Francia volvió a incluir en su lista de paraísos fiscales.