Maduro dijo lo siguiente anteayer:
“Solo nosotros tenemos el concepto, la visión, el poder y la capacidad para hacer de Venezuela una Venezuela potencia, esa es la verdad verdadera”,
Y ayer dijo:
“Ustedes saben que los sueños se hacen realidad. Cinco años después podemos decir: comandante Chávez, ha valido la pena. Misión cumplida. Pero ahora es más grande la misión que nos falta por cumplir, y para eso necesitamos trabajo y tiempo. Y amor. Para cumplir como hemos venido cumpliendo”.
Oír a Maduro decir estas barrabasadas refuerza nuestra convicción de que este estúpido no debe permanecer ni un “milímetro más” en el poder. ¿Qué concepto, que visión, que poder y que capacidad tiene este soberano payaso? ¿Cuál es su misión cumplida? Ya era chocante oír decir al difunto: “Solo Chávez puede gobernar a Venezuela”. Esa balandronada lo convirtió en el hazmerreír de medio mundo. Pero ahora estas impúdicas mentiras de Maduro nos llenan de indignación.
¿Cuál es el Concepto? El chavismo salvará a la humanidad, según reza el Plan de la Patria. Pero lo que Maduro ha logrado es sumir al país en la más completa oscuridad y ha llegado a carecer de dinero para imprimir los billetes que necesita para hacerle creer al país que tiene dinero.
¿Cuál era la Visión del Difunto? Formar una coalición a punta de dinero petrolero, la llamada Alianza Anti-Imperialista Mundial, para liquidar a los estados Unidos. Esta alianza ha tenido algunos problemitas: Chávez falleció; Gadafi fue muerto a manos del pueblo; Lula parece que va a la cárcel; Asad asiste a la desintegración de Siria; Kirchner se murió o lo mataron y Cristina se anda escondiendo. Evo fue derrotado políticamente y está acusado de ladrón. Correa está diciendo: “no más”. Los Castro se despiden agarrados de la mano con Obama. Ortega tiene su infierno en vida, casado con una harpía. La Alianza está en el suelo pero le costó a Venezuela unos $100.000 millones.
¿Qué Poder, Maduro? Ni Cilia te hace caso. Eres un títere en manos de los cubanos y de la Fuerza Armada de Venezuela, quienes se siguen repartiendo el botín nacional con los contratistas de PDVSA.
¿Y cuál Capacidad? Este es el alegato de Maduro que más hace reír al mundo: su capacidad. El tipo es un analfabeta funcional, un patán que pretendió hacerse pasar por abogado cuando lo nombraron Director de PDVSA, un ex-reposero del Metro de Caracas, el creador de los 4,6,8,12 motores del desarrollo revolucionario. Tremenda capacidad.
El colmo de la estupidez es creer que no se es estúpido, que se es un estadista, que los últimos cinco años de tragedia venezolana “valieron la pena”.
De allí que la estupidez haya encontrado su ideal unidad de medida, el kilomaduro (Mil Maduros), definido como el grado de estupidez necesario para ser miembro del gabinete ejecutivo madurista o magistrado del Tribunal Supremo de Justicia. Por supuesto, es difícil ser tan estúpido como Maduro. Un Pedro Carreño tiene unos 700 Maduros y Darío Vivas unos 650 Maduros. Iris Varela si tiene unos 1100 Maduros, es decir, 1.1 Kilomaduros. Los miembros del TSJ exhiben dos kilomaduros de estupidez, el doble de quien le da su nombre a la medida.
Otros miembros del equipo como Héctor Rodríguez han roto el kilomadurómetro, mientras Giordani ya se hizo acreedor al Kilomaduro de Oro, con su proyecto Orinoco-Apure.
Hay otros chavistas que son perversos pero que solo poseen algunos milimaduros de estupidez, como López Padrino, Rafael Ramírez o Hermán Escarrá. Estos son líderes en traición, peculado o adulancia pero no son estúpidos.
Un furibundo chavista, un tanto mitómano, escribe lo siguiente en APORREA:
“Bueno, después de haber captado las señales para 3 canales, dejé el selector fijo en el canal del estado, VTV, con la intención de ver noticias o escuchar cosas interesantes sobre cosas prácticas y reales … pero … después de solamente algunos pocos minutos, del asco que me dio, apagué el televisor. Lo que escuchaba era una incestuosa mezcla de propaganda gubernamental al estilo Mussolini (ver: https://www.youtube.com/watch?v=sLIfz4Obnro), con clips de Maduro gritando o diciendo cosas, gente adulando a Maduro, como si fuera el emperador de Roma pero utilizando en los clips tomas de alocuciones de Chávez, como para tratar de dar la impresión de que Maduro es Chávez, o algo así. De todas maneras, eso me dio asco …”.
Así se habla de Maduro en APORREA, casi la única trinchera de opinión que le queda al régimen. La conciencia de su estupidez ya ha penetrado hasta las raíces del chavismo.