La escalada inflacionaria y la poca disponibilidad de productos de belleza como tintes, champú y tratamientos para el cabello ponen en jaque a las distribuidoras que ofrecen esta mercancía en Anaco. Así lo reseña eltiempo.com.ve / Danela Luces
Así lo reportan propietarios y encargados de estos locales, quienes aseguraron que en lo que va de año se ha dificultado el despacho de artículos por parte de los proveedores y la poca mercancía que reciben llega con nuevos precios.
Señalaron que las ventas han mermado.
“Los pedidos llegan incompletos. Es difícil conseguir los tintes y agua oxigenada”, dijo Cliveland Silva, dueño de la distribuidora Mérida.
El comerciante indicó que por esa razón hay una merma de 70%, aproximadamente, en las ventas.
“Si antes vendíamos 50 tintes al día, ahora vendemos 15. Si no hay entrada de mercancía no hay salida”.
En el caso del agua oxigenada dijo que anteriormente recibían 2 mil 500 en un mes y ahora sólo llegan 1.000.
“Además, cada 40 días, que es el compás de recepción de los pedidos, suben los precios. En lo que va de año se han registrado al menos tres incrementos en los productos. Eso trae como consecuencia que uno se descapitalice porque no se estabiliza el precio, ya que la inflación no lo permite”.
Dijo que cada aumento ha oscilado entre 15 y 20%.
Silva agregó que además las ventas han bajado porque la mayoría de las personas tiene como prioridad adquirir alimentos.
“El poder adquisitivo del ciudadano de a pie ha disminuido. La gente está más interesada en comprar comida que en este tipo de productos que anteriormente eran considerados como prioritarios porque la mujer venezolana se preocupa mucho por su apariencia. Eso ha cambiado y ahora este rubro pasó a un segundo plano por el alto índice de inflación y la escasez”.
Vitrinas vacías
Carmen Marín, encargada de la distribuidora Yrasen, dijo que en los últimos cuatro meses no han recibido productos para la manicure.
“No hay acetona, ni brillo de uñas. Tampoco hay resina ni gel de uñas”.
Señaló que en cuanto a los productos para el cabello lo que menos reciben son los decolorantes. “Eso está muy escaso y hay colores de tintes específicos como los tonos rubios y los negros que tienen mucha demanda y no los tenemos disponibles”.
Marín apuntó que los proveedores les informan que no pueden despachar los pedidos completos porque no hay.
En opinión de Mercedes Arcia, quien tenía una distribuidora de productos en la avenida Miranda de Anaco, dijo que tuvo que cerrar porque el negocio dejó de ser rentable debido a la poca mercancía que recibía de sus habituales proveedores.
Más gastos
Entre los clientes que han sentido en su bolsillo el aumento de los cosméticos está Marlene Aguilera, quien refirió que ha tenido que ajustar su presupuesto para poder comprar los productos para el cabello.
“La escasez y el alto costo me afectan. Antes compraba un champú y cuando se acababa lo reponía sin problemas. Ahora tengo que comprarlo a los bachaqueros porque no se consigue y estos te lo venden al triple de lo que cuesta”.
Carolina Acosta acotó “compro lo que puedo”.