El presidente del Senado de Brasil, Renan Calheiros, calificó como un “juego con la democracia” la decisión del jefe interino de la Cámara baja, Waldir Maranhao, de anular la sesión que admitió el impeachment de la mandataria Dilma Rousseff, y ordenó continuar con el proceso, ya avanzado en la Cámara alta.
Calheiros calificó también como “intempestiva” la decisión de Maranaho y rechazó su pedido, indicando proseguir con el trámite que el próximo miércoles podría suspender por hasta 180 días a Dilma Rousseff en el ejercicio de la presidencia.
Renan Calheiros leyó su decisión ante el pleno del Senado, lo que provocó gritos de protesta de senadores oficialistas. El parlamentario contestó también el argumento de Maranaho, indicando que los legisladores votaron con plena conciencia, y cuestionó el formato de la comunicación de la suspensión, un oficio.
“Aceptar esta diversión con la democracia sería quedar comprometido con el atraso del proceso”, dijo Calheiros.
Fuente: Brasil 247