Reinaldo Díaz, secretario general del sindicato de trabajadores eléctricos y miembro de la Unión Nacional de Trabajadores (Unete), rechazó las acciones tomadas contra un grupo de 12 trabajadores del Complejo Termoeléctrico General Rafael Urdaneta, Termozulia III, por supuesto saboteo.
Nota de prensa
El pasado miércoles Luis Motta Domínguez, ministro de Energía Eléctrica, denunció que “saboteadores” tenían intenciones de dejar sin electricidad a todo el estado Zulia. “Quitaron el tapón del tanque de aceite del TG3, derramándose 13 mil litros de aceite, lo que detiene la turbina”.
Díaz, por su parte señaló que el Ministro fue mal informado, “aquí lo que sucedió fue que los trabajadores observaron una alarma en una máquina, que correspondía a una fuga en una de las válvulas y corrigieron el nivel. En todo momento la turbina se mantuvo en servicio y no afectó el suministro de energía”.
“Aquí no hubo sabotaje ni terrorismo. Se presentó el Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia) y se llevó a todos los trabajadores que estaban presentes violando el debido proceso. El caso fue manipulado”, alertó Díaz.
El sindicalista exigió al tribunal de control que retire los cargos a los compañeros con la misma rapidez con la que fueron privados de libertad y se les de libertad plena.
Díaz denunció también que los trabajadores del sector eléctrico llevan cinco años con un contrato colectivo vencido. “42 mil familias de trabajadores activos y 10 mil familias de trabajadores jubilados de Corpoelec están comiendo con un contrato colectivo del 2009.
El vocero de Unete detalló que los trabajadores presentaron un pliego conflictivo ante el Ministerio del Trabajo y aseguró que defenderán en todo momento el derecho a manifestar por sus beneficios laborales.
Para finalizar informó que en el Consejo Nacional de Unete que culminó ayer, acordaron una agenda de movilizaciones para exigir libertad plena a los compañeros del sector eléctrico, por la contratación colectiva, por la defensa de los trabajadores en lucha en el sector público y privado, contra el estado de excepción y por el empleo y la producción.