Después de tener más de 4 horas en un campamento montado en la ciudad de Sao Paulo, en una de las calles cercanas a la residencia del presidente de Brasil, Michell Temer, la Policía Militar dispersó a unos 150 manifestantes con chorros de agua, gases lacrimógenos y perdigones, reseña el diario Folha de Sao Paulo (en portugués)
A las 23h45 de ayer, una hora después de ordenar el desalojo del campamento, la Policía Militar entró en acción. Los manifestantes se negaban a abandonar los alrededores de la casa de Temer en el distrito Altos de Pinhero, al oeste de Sao Paulo, e intentaron resistir utilizando colchones como escudo.
Los manifestantes pertenecen al Movimiento de los Trabajadores Sin Techo, MTST, aliados políticos del expresidente Lula.
Después del ultimátum de la policía, Guilherme Boulos, uno de los líderes del movimiento y uno de los coordinadores nacionales del MTST, negoció con la policía la transferencia de la guarimba a un lugar más lejano. Sin embargo, la policía respondió que el destino sugerido estaba dentro del perímetro de seguridad creado el domingo 22 alrededor de la casa de Temer.
“Si piensan que van a parar la pelea no saben lo que está ocurriendo en el país. En los próximos días tendrán una respuesta a la acción de hoy” remató Boulos.
