Jesús González: Venezuela y la anestesia política

Jesús González: Venezuela y la anestesia política

thumbnailJesusGonzalezEn Venezuela el gobierno revolucionario le planteo al país que podía resolver la problemática que vivimos, pero muy por el contrario todos los problemas se incrementaron y esa dirigencia revolucionaria se empeña en decirnos que son los únicos que pueden resolver esta crisis y la verdad es que no.

En una reflexión sobre lo que es este desgobierno revolucionario podemos caracterizar unos puntos: es profundamente  deshonesto, suicida, divisionista,  con un proyecto estatista que intenta formar una gran área de capital social  para democratizaba la economía y  que resuelve todos los problemas, a contra pelo de la historia entienden que el modelo capitalista es malo y nos intentan imponer el modelo socialista,  atrasado y que fracasaron en toda Europa y parte de América Latina que no corresponden con nuestro país y el desenvolvimiento normal de su economía.

Esto trajo consigo una crisis más profunda y de otras dimensiones como lo son la división social  que hasta 1998 no teníamos como uno de los principales problemas pero hoy amenaza con llevar al país a una confrontación civil entre dos bandos que en el fondo no tienen claro cómo resolver el problema, pues la dirigencia de cada bando, parte con el desconocimiento del otro, entrando en un juego de suma cero donde todos estamos perdiendo.





Anestesia política

Según cifras oficiales y tomando como indicador el SIMADI tuvimos una devaluación de 150%en tres meses, a este ritmo al finalizar el año estaremos hablando de una devaluación de 600%, el desabastecimiento de alimentos supera el 70% y la de medicina el 80% y el país parece estar anestesiado.

En los últimos años nos hemos caracterizado por un estilo mediocre de hacer política, generando una profunda desconfianza  de los ciudadanos, pues se eligen a los políticos para que le den respuesta a sus problemas, es decir al no hacerlos le abrimos el camino al conflicto social.

Pero el descrédito y la desconfianza  que hoy tenemos sobre el sistema político no es un problema de capacidad mental de los políticos – aunque sabemos que un grupo están incapacitados-, obedece a 5 causas fundamentales:

1. Política desenfocada de los problemas de la gente: la política genera sus propios problemas políticos y se les olvida que estamos en el medio de la peor crisis económica y social de la historia de Venezuela sólo comparable con la hiperinflación de Bolivia, Ecuador cuando llego a un 1000% en un año y arraso con toda la institucionalidad y líderes políticos del momento.

2. La improvisación: dejan de lada por razones políticas, la experiencia,  la preparación y el conocimiento, pues para ser un buen ministro de infraestructura no basta con haber construido una buena casa o para manejar un hospital saber sacar apéndices, hace falta mucho pero mucho más y esto no se improvisa.

Hay suficiente experiencia acumulada en problemas similares en toda América y el mundo que nos indica cuales son las medidas que tenemos que tomar. Pero la cúpula del PSUV tiene una disfunción se de segundo orden, ellos no saben que no saben y ahí radica su tragedia pues no atienden a las llamadas de atención que está haciendo el ciudadano.

3. Sistema de baja responsabilidad: nadie le cobra por desempeño a nadie, y cuando lo quieren hacer lo bloquean, para ejemplo el Referéndum Revocatorio, así que da lo mismo hacerlo bien que mal, facilitando el estancamiento social, pues nadie es responsable, facilitando así la falta de ética, la corrupción y el desorden social.

La corrupción no es un problema sólo del corrupto es un sub producto de la mediocridad del sistema político incapaz de castigar y generar controles e incentivos que generen mejores técnicas de gobierno.

4. Pacto mínimo común: La actual crisis no se resuelve en quien grita más o quien logra en definitiva la presidencia. Es necesario entender que  se necesita una hoja de ruta compartida pues sin ella será imposible superar esta crisis.

Se hace necesario repensar el país y para esto se debe convocar a sus mejores  talentos para definir un proyecto mínimo de acción, no basta sólo con la dirigencia política es necesario hacer un llamado a todos los investigadores, especialistas y líderes para que sumen esfuerzos en la reconstrucción nacional.

5. Sistema Hipercentralizado, que se aleja de los problemas de la gente y que acaba con toda la institucionalidad intermedia – Alcaldía, Gobernaciones, Asamblea Nacional- dejando a líder máximo en una relación directa con la masa, anulando toda institucionalidad que se oponga.

Resalto el concepto de masa, diferenciando  de ciudadano pues en el fondo el ciudadano que reclama por sus derechos es enemigo del régimen y sólo queda el complaciente que aplaude el desgobierno mediocre que nos dirige.

Pero este sistema centralizado tiene su talón de Aquiles, que es el neopopulismo centralizador, basando en una distribución política partidista de la renta que  al no tener dádivas que repartir tiende a desaparecer, ubicando como el único culpable de la crisis al líder.