Los abogados defensores del comisario Ángel Coromoto Rodríguez, doctores Omar Estacio, Luis Garbán y Fernando Núñez, le solicitaron a la juez 4° de Control de Caracas, María Magdalena Díaz, la inmediata libertad de su defendido.
Nota de prensa
Aducen los letrados que los jueces están en la obligación de revisar en cualquier momento las medidas de coerción personal y que en este caso concurren varias circunstancias que la justifican.
En primer lugar, aducen, en el expediente está comprobado que no hay peligro de fuga. Señalan, los defensores, que el dirigente oficialista, Diosdado Cabello en un programa del 18 de mayo que conduce por Venezolana de Televisión, anunció la detención de Rodríguez y que pese a tal amenaza, este último fue aprehendido dos días después, el 20 del mismo mes, tomándose un café en la panadería que está en el edificio Tajamar, del conjunto Parque Central donde reside.
“Si hubiese peligro de fuga –alegan los abogados- la misma noche del mencionado programa de TV, Rodríguez se habría evadido, cosa que no hizo porque se considera capaz de demostrar, su inocencia, ante cualquier autoridad”, precisaron los abogados.
Adicionalmente, alegan los defensores, Estacio, Garbán y Núñez, que los exámenes médicos practicados por los médicos del SEBIN, que cursan en el expediente, demuestran que Rodríguez es un hipertenso agudo y crónico, con promedio 18 puntos de tensión.
“En tales circunstancias, su permanencia en un reclusorio, arriesga su salud por lo que solicitamos que su aprehensión personal, sea sustituida por medida cautelar de presentación periódica, cada ocho días o en su defecto, por arresto en su residencia”.
Los defensores anuncian que dentro del término de cinco audiencias interpondrán peticiones de nulidad y apelación contra las decisiones dictadas contra Rodríguez.
“La Constitución y el Código Orgánico Procesal Penal – concluyeron- prohíben más de una persecución por los mismos hechos y en el presente asunto después que un fiscal del Ministerio Público pidió la conclusión de la investigación contra Rodríguez, otro fiscal, contradiciendo al primero, procedió a imputarlo por los mismos hechos. Además hay una obscena subversión del debido proceso por lo que se impone la nulidad absoluta de este espurio juicio”.