Ante la grave crisis en materia alimentaria que atraviesa el país el concejal de Maracaibo Leonardo Fernández aseguró que la creación en implementación de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), son otro invento del Gobierno para distribuir la crisis y a su vez, terminar de quebrar las pocas empresas privadas que generan empleos estables para los venezolanos.
Nota de prensa
El edil de UNT aseguró que el gobierno de Nicolás Maduro continua tropezando con la misma piedra. “El problema no está en la distribución, el problema es la producción, no podemos continuar en el ensayo y error, mientras los hogares venezolanos se estremecen por la falta de alimentos”.
En lo que respecta a los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), el parlamentario municipal señaló que “son otro invento del Gobierno para distribuir la crisis y a su vez, terminar de quebrar las pocas empresas privadas que generan empleos estables para los venezolanos”.
“Los Clap no garantizarán los alimentos, puesto que la única forma es incrementando la producción y propiciando un esfuerzo de distribución a través de redes de abastecimiento privadas, con la capacidad de atención para la población” Sentenció.
Aseguró que “a través de los Clap intentan atomizar el desabastecimiento y el alto costo de la vida y para cumplir con tal objetivo tiene que haber cantidades de productos para satisfacer necesidades y la no los hay”.
Saqueos dispersos
A juicio del concejal de maracaibero, el gobierno está dejando al pueblo en un callejón sin salida y rodeado de calamidades. “El desespero de nuestra gente le ha llevado a incurrir en actos impensables para otra época. Sin embargo, cada vez son más casos,” lo que consideró se trata de una escalada de violencia. “Solo en el mes de mayo se registraron al menos 641 protestas por falta de alimentos, lo que equivale a 21 protestas diarias en todo el país,” aseveró.
El gobierno debe entender que no basta con aglutinar lo poco que llega a los supermercados y repartirlos en bolsas de comida para hacerle creer al pueblo que la empresa privada desvía los alimentos, porque el pueblo despertó. Esta nueva figura de distribución es otro capítulo de la corrupción campante que reina en Venezuela, los Clap solo incrementarán la corrupción y el sectarismo al demostrar que los militantes del Psuv tienen preferencias y se aprovechan de lo poco que llega.