Asfixiados aseguran estar los vendedores de alimentos del estado Vargas quienes han debido ceder a los precios especulativos de los bachaqueros para continuar el negocio. Explican que mientras las cuentas por pagar suben, las ventas bajan debido al ajuste en los precio del menú.
Maryelis Pirela, vendedora de almuerzos en el mercado Cacique de Maiquetía, comenta que ha tenido que pagar hasta 40 mil bolívares por un bulto de 24 kilos de arroz y que el precio de la pasta es similar. “Ya no sé cómo resolver el contorno, antes lo hacía con verduras o plátanos pero ya la unidad está en 400 bolívares . Ya ni sirvo puré porque el kilo de papas no baja de 1.000 bolívares ”.
Dice que aún mantiene el precio del almuerzo en 1.500 bolívares , más económico que en otros restaurantes. En un día bueno vende más de 10 platos. “Lo que más buscan es la sopa porque cuesta 1.000 bolívares y la sirvo bien resuelta. Vendía pasticho y arroz a la marinera pero ya es imposible”.
Pirela manifiesta que hasta en los envases para llevar gasta mucho dinero porque “el bulto de bandejas de anime pasó de costar 12 mil a 23 mil bolívares en un par de semanas”. Asegura que la situación es tan crítica que de 20 puestos de comida que hay en el mercado, actualmente trabajan con almuerzos solo tres.