Vecinos de la urbanización Mata Redonda, al sur de Maracay, exigieron ayer a las autoridades respuesta ante la anegación de las calles principales de la comunidad por aguas negras, producto del colapso del sistema de desagüe y las lluvias que han caído durante los últimos días. Así lo reseña elperiodiquito.com /Vanessa Novoa/María Fernanda Peraza
Marcia Rodríguez, habitante de la localidad, indicó que la situación comenzó hace más de dos semanas, cuando maleantes hurtaron la bomba que permite drenar el agua, además de parte del cableado que permitía su funcionamiento.
“Somos alrededor de 512 familias que estamos siendo afectadas por esta situación y no se ha presentado ninguna autoridad gubernamental a ver qué es lo que está pasando, solo viene de vez en cuando Defensa Civil y hace poco estuvieron dos diputados de oposición del Consejo Legislativo del estado Bolivariano de Aragua (Cleba)”, dijo.
Un recorrido por el urbanismo permitió corroborar los malos olores y el incremento de los zancudos en la zona. La calle principal de Mata Redonda, así como la primera y segunda transversal y la calle C, se encuentran anegadas por el agua, que ha avanzado al menos una cuadra desde el último recorrido, hace una semana.
Vecinos califican el problema como crítico, pues temen que comiencen a aparecer enfermedades. Rodríguez indicó también que el agua está llegando con mal olor a los hogares y contaminación con tierra, por lo que no es apta para el consumo humano.
VP solicitó recursos para reparación de bombas de agua
El coordinador Regional de Voluntad Popular en Aragua, Roldman Rojas, en compañía de dirigentes del partido, se presentaron ayer en las instalaciones del Consejo Legislativo del estado Bolivariano de Aragua (Cleba) para hacer entrega de un documento solicitando la aprobación de los recursos necesarios para la reparación de las bombas de achique que se encuentran en las orillas del lago Los Tacariguas y permite el drenaje del agua que afecta a las comunidades cercanas.
Desde hace varios años, los habitantes de la zona esperan por la indemnización que les corresponde por vivir en una zona de alto riesgo, ante la amenaza del Lago de Valencia, que se encuentra a pocos metros frenado por un muro de contención.
“Si ese muro termina de colapsar, esto va a ser un desastre, no podemos seguir así”, puntualizó Rodríguez.